Bailando por un sueño (Chile)

Bailando por un sueño (Chile) nació en Chile.

Bailando por un sueño Chile fue un programa de televisión chileno producido por la productora chilena Lateral y transmitido por Canal 13, basado en la licencia internacional de la empresa mexicana Televisa, Bailando por un sueño y tercera versión chilena del programa mexicano del mismo nombre después de Baila! Al ritmo de un sueño y Bailando.

Fue presentado por el presentador chileno Martín Cárcamo. El jurado estuvo compuesto, en primera parte, por las chilenas Francisca García-Huidobro, Carolina de Moras y Raquel Argandoña; y el argentino Aníbal Pachano.^[2]​ Además, contó con el BAR-SM, integrado por, en primera parte, la australiana Karen Connolly y el chileno Felipe Ríos, cuya función consistió en evaluar la técnica.^[3]​ En el concurso (a diferencia de su versión original en México) participaban 18 parejas (conformada por una personalidad televisiva y un bailarín profesional), que defendían el «sueño» de una fundación, organización o institución benéfica, quiénes deberían demostrar sus destrezas para el baile en diferentes ritmos musicales. Cada pareja recibiría la crítica y puntuación de un jurado. Aquellas parejas que no lleguen a la nota de corte deben bailar una vez más, tras lo cual el jurado elegirá "salvar" a un determinado número de parejas hasta que sólo queden dos. Una de ellas quedaría luego eliminada mediante el voto del público a través de mensajes de texto.

Con motivo de la pandemia de enfermedad por coronavirus de 2020, el 19 de marzo la dirección del programa decidió la suspensión temporal del programa dado que no se puede mantener el formato de galas que caracteriza al certamen de baile.^[4]​ La actividad en el programa y las Galas se retomarán en cuanto la situación mejore y se pueda realizar el programa con absoluta normalidad.^[5]​

En la segunda etapa del programa, esto es, en su regreso tras el receso producto de la pandemia de enfermedad por coronavirus de 2020 se realizaron una serie de cambios.^[6]​ En primer lugar, Carolina de Moras y Aníbal Pachano abandonan el jurado, integrándose en su reemplazo la española Eva Gómez y el chileno Jaime Coloma. Por otro lado, Karen Connolly abandona el BAR-SM, integrándose en su reemplazo el coreógrafo lituano Neilas Katinas. Asimismo, Galadriel Caldirola, Ignacio Lastra, Leo Jr. Méndez Espinoza, Maura Rivera, Valentina Roth, Daniella Chávez y Katherine Orellana abandonan el programa y, en su reemplazo, ingresan nuevos participantes: la actriz Antonella Ríos, el bailarín Nelson Mauricio Pacheco, la modelo y bailarina Faloon Larraguibel, el ex chico reality Leandro Penna, la modelo Jhendelyn Núñez, el periodista Álvaro "Nacho Pop" Reyes y la cantante Karen Bejarano.

Sin embargo, el programa fue nuevamente suspendido luego de que uno de los miembros del equipo dio positivo por Covid-19.^[7]​El 18 de junio de 2020, debido a las denuncias por realizarse el programa en plena pandemia, y la poca viabilidad financiera, el programa fue cancelado definitivamente.^[8]​

El programa era transmitido los lunes, martes, miércoles y jueves a las 22:30 hs. Consistía en un concurso de baile (a diferencia de su versión original en su país de origen, México), donde semana a semana famosos y famosas del mundo del espectáculo nacional e internacional, defendiendo el «sueño» de cualquier fundación, institución u organización benéfica que representan, luchaban por lograr ganar el certamen demostrando sus destrezas para el baile en diferentes ritmos musicales.

El jurado da su puntaje después de que cada pareja presenta su respectivo baile del 0 al 10. Las parejas que no lleguen al puntaje mínimo en cada ronda quedarán sentenciados y se batirán a duelo, en el cual deben repetir la coreografía. El jurado y el BAR-SM deberá ir salvando a las parejas en función de su performance hasta que sólo queden dos de ellas, que irán al voto telefónico. Además estará el BAR-SM, integrado por dos profesionales de la danza y la actuación, quienes evaluarán la técnica. Cada integrante puede subir o bajar un punto, y a su vez puede ser pedido por el presentador, el jurado, los jefes de coaches, los coaches y los participantes.

Las dos parejas que fueron sentenciadas y que luego no fueron salvadas por el jurado en el duelo, se enfrentan en un duelo telefónico, donde sólo el público tiene la decisión con sus mensajes de textos.

Notas