Las furgonetas cámper (en Argentina casa rodante) son vehículos derivados de las furgonetas para uso campista que proporcionan movilidad y acomodo para dormir. Las cámper son un tipo de autocaravana más pequeña en la que prima la movilidad sobre el espacio y la comodidad, por lo que es habitual referirse a las cámper como caravanas aunque no sean exactamente lo mismo.
Tradicionalmente era la marca alemana Volkswagen, en asociación con la también alemana Westfalia, la que fabricaba la adaptación para convertir la furgoneta en vehículo-vivienda, y por tanto tenía un mayor control de este mercado Westfalia fue adquirida por Mercedes Benz para la adaptación de sus furgonetas Vito y Viano.
Otras compañías fabricantes de caravanas se han incorporado al segmento de las cámper y existen también preparadores independientes.
Se caracterizan este tipo de vehículos por tener elementos de acampada que permiten pernoctar y comer en ellos, aun siendo relativamente pequeños en comparación con las autocaravanas.
Existen otros lugares, como en México, donde las cámper son accesorios para camionetas que cubren la parte trasera, las cuales se pueden adquirir en varias versiones y materiales. Los más usuales son en fibra de vidrio, aunque también se pueden fabricar en lámina de aluminio o madera. Dentro de las variantes de materiales existen modelos como el modelo a Ras de cabina, modelo panorámico, u1v y safari, siendo el modelo a ras de cabina el más bajito que va casi o a ras de toldo del vehículo, el panorámico es más alto y puede ir con ciertas variaciones como entradas aerodinámicas o lisas, los modelos u1v y safari son propios de los modelos de lámina y se le considera u1v los modelos que no traen volado sobre cabina y safari a los que traen una extensión sobre el vehículo, también llamado volado sobre cabina.
Los principales fabricantes de cámper en México son: Campers Leer, seguido de Arcafesa y Proa; son empresas establecidas en el estado de Jalisco y teniendo ligeros competidores como Campers Lider y Casetas de Oriente. Las furgonetas cámper, se caracterizan por pasar inadvertidas, normalmente no mantienen ningún signo exterior de que su equipamiento permite dormir en su interior, práctica que está prohibida en muchos municipios españoles salvo en lugares especialmente indicados (zonas de acampada). Esta ventaja convierte a las furgonetas cámper en muy populares entre los amantes del aire libre, ya que al pasar inadvertidas pueden acampar en más lugares y estacionar en muchos cascos urbanos, donde con una autocaravana no podrían.
La práctica más habitual para camperizar una furgoneta consiste en la transformación a vehículo vivienda, para lo cual se requiere un proyecto de ingeniería, documentación del fabricante del vehículo autorizando la transformación, y acudir a la inspección técnica de vehículos para realizar la homologación.
En el proceso de camperización existen muchas instalaciones posibles, pero ninguna es realmente obligatoria exceptuando el colchón, algunas de las instalaciones más importantes son:
Estas instalaciones requieren de una homologación pertinente para poder circular, es por eso que mucha gente recurre directamente a empresas especializadas en furgonetas camper para ello.
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