«Cherish» es una canción interpretada por la cantante estadounidense Madonna, incluida en su cuarto álbum de estudio, Like a Prayer. La compañía Sire Records, en asociación con Warner Bros., la publicó como el tercer sencillo del disco el 1 de agosto de 1989, y posteriormente figuró en los recopilatorios The Immaculate Collection (1990) y Celebration (2009). Compuesta y producida por Madonna y Patrick Leonard, se basa en temas sobre el amor y las relaciones y está inspirada principalmente en la tragedia Romeo y Julieta (1597), de William Shakespeare. Además, se incluyó un verso de la canción del mismo nombre de la banda The Association. «Cherish» presenta elementos de la música pop y el doo wop e instrumentos como la caja de ritmos, las percusiones, el teclado y el saxofón. La letra trata sobre la devoción de Madonna con su amante y su promesa de estar siempre a su lado.
En términos generales, recibió reseñas positivas de los periodistas y críticos musicales: algunos quedaron sorprendidos por el cambio de contenido y la imagen más suave en la música de Madonna, a diferencia de sus dos anteriores sencillos de Like a Prayer, que incorporaron temas como la religión y la sexualidad. Por su parte, otros la consideraron como una pista alegre y la letra fue comparada a las palabras pronunciadas por Julieta en la obra del dramaturgo. Desde el punto de vista comercial, llegó a la segunda posición de la lista Billboard Hot 100, por lo que le otorgó a Madonna el récord de tener dieciséis sencillos consecutivos en los cinco primeros puestos de esa lista. Alcanzó el primer lugar en Canadá y en el conteo de adulto contemporáneo de Estados Unidos y a las cinco primeras posiciones en Australia, Irlanda, Italia, Nueva Zelanda y Reino Unido.
Para promocionar el sencillo se creó un vídeo musical en blanco y negro dirigido por el fotógrafo Herb Ritts y rodado en la playa de Paradise Cove, en Malibú. En él, la cantante se interpretó a sí misma, mientras que cuatro extras disfrazados como tritones nadaban dentro y fuera del mar. Un académico y autor del libro Experiencing Music Video señaló que los tritones se convirtieron en símbolos de la comunidad homosexual y que el vídeo retrataba la opresión. Otro editor señaló que Madonna mostró su lado más alegre, a diferencia de «Like a Prayer» y «Express Yourself». También se incluyó en listas de los mejores videoclips de la cantante. Madonna interpretó «Cherish» en la gira Blond Ambition World Tour de 1990, donde incluyó a sus bailarines vestidos como tritones. La actuación se vio como una desexualización a los hombres, por relegarlos a objetos de adoración.
«Cherish» fue compuesta y producida por Madonna y Patrick Leonard, y publicada el 1 de agosto de 1989 como el tercer sencillo del cuarto álbum de estudio de la cantante, Like a Prayer. La canción se basa en temas sobre el amor y las relaciones y está inspirada principalmente por la tragedia de William Shakespeare, Romeo y Julieta (1597). Madonna estaba leyendo la historia mientras descansaba de los ensayos de Speed-the-Plow (1988), una obra de teatro de Broadway en el que era protagonista. En el tercer día de las sesiones de grabación de Like a Prayer, presentó la letra de la canción a Leonard y explicó que la había compuesto «una tarde soleada en la playa», aunque posteriormente confesó que en realidad fue creada en su sala de maquillaje. De este modo, Leonard introdujo una línea de la canción del mismo nombre de la banda de los años sesenta The Association, Cherish is the word I use, después de que Madonna decidiera incluirla en Like a Prayer.
El lado B de «Cherish» fue un tema inédito titulado «Supernatural», compuesta durante las sesiones del tercer álbum de estudio de la intérprete, True Blue (1986). En una entrevista para la revista Rolling Stone realizada en 2009, la artista confesó que nunca había sido capaz de predecir si sus canciones habrían tenido un éxito comercial, independientemente de su opinión personal de ellas. Como ejemplo, citó a «Cherish» como una de las más «retardadas» que había compuesto, pero señaló que se convirtió en un éxito en las listas musicales. Además de incluirse como la sexta pista de Like a Prayer, también figuró en los álbumes recopilatorios The Immaculate Collection (1990) y Celebration (2009).
«Cherish» es una canción de género pop y con estilos de doo wop que abre el segundo lado de Like a Prayer. Inicia con el sonido de sintetizadores y del teclado, cuando Madonna canta repetidamente las palabras Cherish, cherish. A esto le sigue el sonido de una caja de ritmos, mientras que la percusión y las guitarras acompañan su voz. Durante el puente, la artista canta la línea Cupid please take your aim at me —«Cupido por favor, apúntame»— cuando la música del teclado se hace más pronunciada. El tambor cambia su ritmo y Madonna recita las líneas del estribillo Cherish the joy, of always having you here by my side —«Aprecio la alegría de tenerte aquí a mi lado»—, acompañada de coros y un bajo eléctrico. El segundo verso continúa de la misma manera, mientras pronuncia Romeo and Juliet, they never felt this way I bet, So don't underestimate my point of view.
Al terminar el segundo estribillo, un saxofón comienza a tocarse cuando Madonna pregunta suavemente al oyente: Who? You! Can't get away, won't let you —«¿Quién? ¡Tú! No puedes irte, no te dejaré»—, seguido de la línea inspirada en The Association que Leonard incluyó en «Cherish». Los coros continúan repitiendo las palabras sobre un corno francés, cantadas en la nota de si♭ menor. Los tambores y la percusión empiezan de nuevo y el estribillo es cantado dos veces, antes de desvanecerse. Según la partitura publicada en Musicnotes.com por Alfred Publishing Co., Inc., «Cherish» se establece en el compás de 4/4, con un tempo «moderadamente rápido» de 130 pulsaciones por minuto. Está compuesta en la tonalidad de re mayor y el registro vocal de Madonna se extiende desde la nota la3 a re5. Sigue la progresión armónica de sol/re-re-mi menor7-re en el comienzo de la canción, para luego cambiar a re-re menor-do-mi menor7 durante los versos, y finalizar con sol-re/sol-la-re/fa♯ en el estribillo.
«Cherish» es una canción de amor simple, donde Madonna habla de la devoción y estar con su amante a su lado, a quien nunca dejaría. Según el semiólogo Thomas Sebeok, la columna vertebral del tema se construye mediante la incorporación de títulos de anteriores éxitos pop románticos. Canciones como «Cupid» de Sam Cooke, «You Are My Destiny» de Paul Anka y «I Can't Let Go» de The Hollies se utilizan en el primer verso, mientras que los otros usan las palabras de esos títulos de canciones como «Burning Love» de Elvis Presley y «Two Hearts» de Bruce Springsteen. Otros ejemplos incluyen la referencia a la canción del mismo nombre de The Association y Romeo y Julieta, de Shakespeare. Richard Burt, autor de Shakespeare After Mass Media, dedujo que las líneas en «I Can't Let Go» y Romeo y Julieta hacen al orador alternarse entre la asertividad y la dependencia. Por su parte, Sal Cinquemani, de Slant Magazine, consideró que aunque «Cherish» era una canción «radiante» que invocaba a la música pop de los años '60, «en el gran esquema pop, solo palidece en comparación con sus homólogos gloriosos, [pero aun así] hace a Like a Prayer uno de los álbumes pop por excelencia de todos los tiempos».
En términos generales, «Cherish» obtuvo reseñas muy positivas de los críticos y periodistas musicales. Wayne Robins, de Newsday, pensaba que era ilustrativa del tipo de pop aleatorio que se daría si William Burroughs fuese el director de programación de una emisora de radio de los Top 40. Richard Burt comparó la canción y la entrega de Madonna en la letra con los diálogos hablados por Julieta, y encontró similitudes en la línea de la obra Sweet so would I, Yet I should kill thee with much cherishing —«Mi vida, también yo lo quisiera, aunque te mataría por exceso de halagos»—, con la letra de «Cherish». Allen Metz, uno de los autores de The Madonna Companion, consideró que, al ser la canción de apertura del lado B de Like a Prayer, reafirmó el romanticismo dulce y feliz que faltaba en el lado A del álbum. Al respecto, Metz mencionó: «Igualmente influida por el pop y la iglesia, Madonna se renueva gracias al poder restaurador de la música, en este caso una mezcla de soul clásico tierno y el pop moderno de L.A.». Por su parte, Lucy O'Brien, en Madonna: Like an Icon, aseguró que el tema era típico de los esfuerzos musicales anteriores de la cantante y hubiese sido más conveniente incluirlo en su tercer álbum de estudio, True Blue, cuyas canciones tratan principalmente sobre el romance y las relaciones. El crítico musical J. D. Considine, de Rolling Stone, la elogió por crear un «sentido impresionante del equilibrio», al contrastar su naturaleza alegre con el trauma de «Oh Father», el siguiente tema del álbum. Además, encontró referencias retro-rock en la pista. El equipo de redacción de HowStuffWorks? comentó que «Cherish» encuentra a Madonna en un estado de ánimo inocente, cantando sobre los placeres del amor verdadero. Nicole M., contribuidora del sitio Yahoo!, opinó que es una representación de una canción pop, desde el compás a la letra, pero funciona. Louis Virtel de The Backlot declaró que, aunque es sentimental y fresca, puede ser también la canción más alegre de la historia. Continuó: «Es [esa] clase de regocijo que hace que un hombre de profundo conocimiento artístico como Herb Ritts [...] filme un vídeo sobre sirenas».
Freya Jarman-Ivens, uno de los autores de Madonna's Drowned Worlds, afirmó que era uno de los trabajos en puro romanticismo de Madonna y agregó: «Ella debería volver a la fórmula de vez en cuando, pero creo que ha ido más allá de todo eso». Carol Clerk, en su libro Madonnastyle, señaló que la naturaleza «refrescante» de la pista era particularmente evidente si uno sigue el catálogo de Madonna cronológicamente, considerando la emblemática naturaleza de su predecesora «Express Yourself» y la melancolía de la sucesora, «Oh Father». Por el contrario, la académica Maria Raha escribió en Cinderella's Big Score: Women of the Punk and Indie Underground que estaba llena de letras «triviales». Andy Goldberg, del Jerusalem Post, dijo que «Cherish» tomó a «Madonna de vuelta a sus antiguas tierras, las líneas de bajo enérgicas y las melodías cadenciosas de sus exitosos álbumes pasados». Kevin Phinney, de Austin American-Statesman, se sorprendió por su contribución en la canción y confesó que «[era] difícil de creer que ella haya escrito esto». Aun así, continuó diciendo que quería que Madonna fuese a una dirección más madura y compusiera canciones musicalmente similares a «Cherish». En una crítica menos positiva, Richard Harrington, periodista del Washington Post, explicó que «mientras [algunas] canciones en Like a Prayer abordan asuntos que abren su corazón, con "Cherish", Madonna trata cuestiones que cierran su corazón». Por otra parte, Ian Blair, del Chicago Tribune, quedó satisfecho con el resultado y mencionó que es un «ejemplo enérgico, positivo y expertamente elaborado del pop puro en todo su esplendor». Lennox Samuels, de The Dallas Morning News, apreció el tema alegre de la canción y elogió a la artista y a Leonard por no quedarse solo con canciones personales en el álbum. Sin embargo, Dale Anderson, de The Buffalo News, expresó que se convertiría en uno de los lanzamientos más olvidables de la cantante, pero también fue esperanzador que no lo sería. Esta opinión la compartió Don McCleese, del Chicago Sun-Times, quien agregó que no era algo que esperaba de Madonna en ese momento y se mostró decepcionado de que volviese al tipo de canciones «despreocupadas y sentimentales», que no coincidía con su imagen. Dan DeLuca, de The Philadelphia Inquirer, mientras reseñaba el concierto en Filadelfia de la gira Drowned World Tour (2001), la comparó a canciones de Chris Robinson con gracia y añadió que «solo si él fuese gay cantaría algo así».
«Cherish» obtuvo los elogios de la crítica y desde su lanzamiento, ha sido incluido en numerosas listas de lo mejor de 1989 y de los mejores temas de Madonna. Por ejemplo, Keith Caulfield, editora de la revista Billboard, elaboró un conteo de sus 40 mayores éxitos en la lista Hot 100, donde «Cherish» se ubicó en el puesto número 17. Al respecto, la describió como una canción «suave y tierna» y señaló que fue un retroceso a los grupos femeninos de los años 1960 y la música doo wop. Bill Lamb, de About.com, creó el ranking de los 38 sencillos de la cantante que llegaron al top ten de la Billboard Hot 100; «Cherish» fue la 17.ª canción que llegó a los diez primeros de esa lista, por lo tanto, también se ubicó en esa posición en el ranking. Como un comentario, Lamb notó que tenía una sensación claramente «más ligera» que «Like a Prayer» y «Express Yourself», los dos sencillos anteriores de Like a Prayer. Nicole M., de Yahoo!, la ubicó en el vigésimo lugar de las 20 mejores canciones de la intérprete y afirmó que tiene un ritmo divertido que te dan ganas de bailar, y la letra «trepidante» hacen al oyente querer cantarla. En honor al cumpleaños 53 de Madonna, Mark Graham de VH1 elaboró un conteo de sus 53 canciones más destacadas, y «Cherish» quedó en el décimo puesto. Al respecto, comentó: «Romeo and Juliet/They never felt this way, I bet!. Una de las pocas canciones de amor de Madonna, esta cancioncilla encantadora [y] linda fue mejorada por un vídeo increíblemente cinematográfico, dirigido por el legendario fotógrafo Herb Ritts». También figuró en las listas de lo mejor de la cantante en sitios como Boy Culture y Culture Brats, y en el conteo de los mejores sencillos de 1989 de Z100.com y Top Hits Online. Finalmente, Melinda Newman de HitFix, en su reseña de los 10 mejores temas de Madonna, señaló que era un retorno a las canciones dance pop alegres de sus primeros años y afirmó que suena «a pura alegría».
Tras su publicación, «Cherish» cosechó una recepción comercial muy positiva en la mayor parte del mundo. En los Estados Unidos, ingresó en el puesto número 37 de la lista Billboard Hot 100, y en la edición siguiente —el 25 de agosto de 1989— se trasladó al 28. Después de cuatro semanas, llegó a los cinco primeros de la Hot 100, por lo que se pronosticó que se convertiría en el octavo sencillo número de Madonna en la lista. Sin embargo, comenzó a competir con «Miss You Much», de la cantante Janet Jackson, que también se trasladó a los diez primeros esa misma semana. Esto causó que los medios populares enfrentasen a ambas e intentaran crear rivalidad entre ellas. Finalmente, «Cherish» alcanzó la segunda posición el 7 de octubre de 1989, la misma fecha que «Miss You Much» había llegado a la cima del ranking. No obstante, esto lo convirtió en el décimo sexto sencillo consecutivo de Madonna en alcanzar los cinco primeros puestos del conteo, un récord de la cantante en la historia del Hot 100. En total, estuvo presente quince semanas allí. A diferencia de sus anteriores sencillos, «Cherish» no logró entrar en la lista Dance/Club Play Songs, pero sí llegó a la cima en Adult Contemporary, su tercer número uno en ese momento, después de «Live to Tell» y «La isla bonita», ambos pertenecientes al álbum True Blue (1986). Con «Cherish», Madonna obtuvo el premio a mejor artista de adulto contemporáneo en los Billboard Music Awards de 1989. En la lista anual de Billboard, ocupó las posiciones 31 y 59 en Adult Contemporary y Billboard Hot 100, respectivamente. En Canadá, por su parte, debutó en el número 80 de la lista RPM el 14 de agosto; en su novena semana, alcanzó el primer lugar y permaneció allço por dos ediciones consecutivas. En total, estuvo diecisiete semanas y fue el noveno sencillo más vendido de Canadá en 1989.
La buena recepción comercial de «Cherish» continuó en los países de Europa. Así, en el Reino Unido, debutó el 16 de septiembre de 1989 en la decimosexta posición de la lista UK Singles Chart. Siete días después, se trasladó trece lugares hasta el tercer puesto, por lo que se convirtió en su 21.º sencillo en llegar al top diez en ese país. Según The Official UK Charts Company, vendió 200 000 copias desde su lanzamiento. En Irlanda, alcanzó la segunda posición, mientras que en Italia y la Unión Europea, la tercera. En los demás países europeos, ocupó los lugares siete en Bélgica, diez en España, Noruega y Suiza, trece en los Países Bajos, dieciséis en Alemania y Austria y veintiuno en Francia. Por último, la canción obtuvo buenos resultados tanto en Australia como en Nueva Zelanda; en el primero, entró por primera vez el 17 de septiembre en el puesto diecisiete. Catorce días más tarde, alcanzó la posición más alta, en el número cuatro, y para fin de año, se ubicó en el 47 de los 50 sencillos más vendidos de 1989. Mientras tanto, en el segundo país, permaneció dos semanas consecutivas en la séptima posición de la lista, mientras que en total, por once.
Para la promoción de «Cherish», se realizó un vídeo musical en blanco y negro dirigido por Herb Ritts y filmado el 22 de julio de 1989 en la playa de Paradise Cove, en Malibú, California. Su estreno mundial tuvo lugar en MTV el 28 de agosto de ese año. Ritts era uno de los fotógrafos preferidos de Madonna en aquel momento y anteriormente había trabajado con la cantante en las portadas de True Blue y Like a Prayer. Cuando le pidió dirigir el videoclip de «Cherish», intentó disuadirla al decir: «Pero todavía soy un fotógrafo. No sé nada sobre películas», a lo que impávida, Madonna respondió simplemente: «Pues tienes un par de semanas para aprender». Entonces, Ritts conceptualizó el vídeo; según él, quería retratar a tritones en su hábitat natural. Al principio, Madonna se opuso a la idea, ya que quería representarse como ella misma, pero mantenerlos también. Por lo tanto, cuatro artistas masculinos fueron contratados para esto, uno de ellos era el modelo Tony Ward, quien posteriormente sería la pareja de Madonna y aparecería en el vídeo de «Justify My Love» (1990). Los otros tres eran jugadores de waterpolo cerca de la Universidad de Pepperdine. Para el proyecto, se crearon cuatro colas de tritones hechas por Global Effects en el norte de Hollywood, California. Además, se moldearon tres colas de goma sólida flexible y de dieciocho kilos de peso; si hubieran sido más ligeras, habrían flotado y los nadadores habrían acabado cabeza abajo en el agua. Una vez en las colas, los jugadores debían ser llevados hacia y desde el agua y, una vez dentro, tenían una gran fuerza y agilidad para nadar. Una de las razones por las que el vídeo se filmó en blanco y negro fue porque el agua estaba muy fría, lo que provocó que la tez pálida de Madonna se viese incluso más blanca. Al respecto, el comisariado artístico Paul Martineau comentó: «Lo filmó en color, pero el agua estaba muy fría, el color de su piel cambió y uno de los "tritones" tuvo hipotermia, así que decidieron usarlo en blanco y negro».
Fouz-Hernández dedujo una relación entre la música y las imágenes en el vídeo de «Cherish», al decir que ambas se complementan; el autor sentía que esto a su vez animó al espectador a verlo varias veces. Además, habló sobre el equilibrio de la altura y la profundidad que ocurren en el videoclip. Las representaciones visuales de los tritones y la iluminación utilizada fueron influenciadas por la fotografía de Ritts conocida como «The Male Nude Bubble», que mostraba a modelos desnudos dentro de un tanque de agua gigante, con una tela blanca enrollada alrededor de ellos. Muchas de las cualidades en las fotos, incluida la naturaleza flotante de los modelos, se utilizaron en el nado y la pose de los muchachos. Mark Graham, del canal estadounidense VH1, señaló que, «a diferencia de "Like a Prayer" y "Express Yourself", [...] no era una idea grande en la naturaleza, pero mostró el lado alegre de Madonna [...] en [un] contraste perfecto, con la imagen de ella como un pararrayos para la controversia y las críticas». Por otra parte, Carol Vernallis, autor de Experiencing Music Video, encontró connotaciones homoeróticas entre la cantante y los tritones. Estos existen en un mundo autónomo propio, donde procrean con su propia especie, tanto biológica como socialmente. El hecho de que no tenían órganos genitales llevó a Vernallis a asociarlos a otras representaciones de Ritts de esculturas homoeróticas sin penes. En el videoclip, sus colas dibujaban diferentes significados, incluidos los sexuales y el simbolismo cristiano. Puesto que en el arte contemporáneo son raras las imágenes de tritones, mientras que las de sirenas son prominentes, a veces son llamados «hadas», en parte porque no se sabe cómo llegaron a surgir. Vernallis creyó que el misterio y el carácter esquivo de ellos en el vídeo desempeñaron un papel crucial, debido a que nunca se dirigen a la cámara directamente y se muestran a menudo desapareciendo de la vista. Por último, el autor mencionó que, dado que la invisibilidad es un tema central en la comunidad homosexual, esto en realidad retrata la opresión y también el deseo de ver, pero nunca ser visto. Louis Virtel del sitio NewNowNext, en honor al cumpleaños 55 de Madonna, incluyó a «Cherish» en el puesto número 30 de sus 55 mejores vídeos y elogió los «tritones majestuosos» de Ritts. Por su parte, Gregory Ellwood, de HitFix, lo ubicó en la novena posición de los diez mejores de la artista y comentó: «Es una impresionante yuxtaposición de tritones desnudos nadando por las altas olas del océano Pacífico cuando Madonna cae a los encantos de uno de ellos en la playa rodada gloriosamente en blanco y negro». Además, también explicó que fue el segundo vídeo de Madonna «con una larga fila de imágenes homoeróticas, ya sea intencionadas o no (después de "Express Yourself") y anunció los riesgos que asumiría durante la siguiente década».
Madonna interpretó «Cherish» solo en su cuarta gira, Blond Ambition World Tour (1990). La presentación reflejó la secuencia del vídeo, mientras que tres bailarines de la cantante estaban vestidos como tritones. El autor Carol Clerk señaló, en su libro Madonnastyle, que el traje que la cantante usó durante esta secuencia era el más simple y suave del espectáculo; consistió en un minivestido negro recortado y cosido con una cigüeña de peluche, llamada marabú. Madonna daba vueltas alrededor de sus bailarines, mientras tocaba un arpa. Durante el estribillo, los bailarines alzaban las colas protésicas y las entre ellas. Guilbert pensó que la actuación desexualizó a los hombres, por relegarlos a objetos de adoración, como los tres tritones. Esta opinión la compartió Mark Bego, autor de Madonna: Blonde Ambition, quien expuso que «Madonna y sus chicas actúan como adolescentes, pero dan la impresión de que están al mando mientras juegan con los tritones o los provocan». Dos interpretaciones diferentes de la canción fueron grabadas e incluidas en los álbumes de vídeo Blond Ambition – Japan Tour 90, filmado en Yokohama, Japón, el 27 de abril de 1990, y Blond Ambition World Tour Live, rodado en Niza, Francia, el 5 de agosto del mismo año.
Desde su lanzamiento, varios cantantes y bandas versionaron «Cherish», tal es el caso del cantante brasileño Renato Russo, que incluyó una versión acústica del tema en su álbum The Stonewall Celebration Concert (1994). El disco recopilatorio Virgin Voices 2000: A Tribute to Madonna contiene un cover de la canción, hecho por la banda de worldbeat Loop Guru. Otra versión en rock alternativo de The Prayers figuró en el álbum tributo a Madonna, Through the Wilderness (2007); Scott Lapatine, un editor de Stereogum, la incluyó en el puesto número 11 de las 20 mejores versiones indie rock de Madonna.
Fuentes: notas del álbum Like a Prayer.
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