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Duquesa de Maine



¿Qué día cumple años Duquesa de Maine?

Duquesa de Maine cumple los años el 8 de noviembre.


¿Qué día nació Duquesa de Maine?

Duquesa de Maine nació el día 8 de noviembre de 1676.


¿Cuántos años tiene Duquesa de Maine?

La edad actual es 347 años. Duquesa de Maine cumplirá 348 años el 8 de noviembre de este año.


¿De qué signo es Duquesa de Maine?

Duquesa de Maine es del signo de Escorpio.


Luisa Benedicta de Borbón, en francés original Anne Louise Bénédicte de Bourbon (París, 8 de noviembre de 1676 - íd. 2 de enero de 1753) fue la hija de Enrique III de Borbón-Condé y Ana de Baviera. Como miembro de la casa de Borbón reinante, era una princesa de sangre. Obligada a casarse con Luis Augusto de Borbón, hijo legitimado de Luis XIV y Madame de Montespan, destacó en la política y las artes y mantuvo un salón literario muy popular en el Hôtel du Maine así como en el Château de Sceaux.

Luisa Benedicta nació el 8 de noviembre de 1676 en el Hôtel de Condé[1]​ en París. Era la octava hija de los que entonces eran el duque y la duquesa de Enghien. El nombre Bénédicte se añadió en honor de la tía materna de las hijas, Benedicta, duquesa de Brunswick-Lüneburg.

Creció en el Hôtel de Condé con sus muchas hermanas y tuvo que tolerar condiciones parecidas a la esclavitud bajo la locura de su padre. Su madre, que era pía y suave, recibía a menudo palizas de su padre, lo mismo que el personal de la casa y su hermana María Ana, Mademoiselle de Montmorency. Cuando se dirigían a ella formalmente, Luisa Benedicta era llamada Mademosielle d'Enghien. Como princesa de sangre, recibía el tratamiento de Alteza Serenísima. Y como a los nueve años de edad a su padre le otorgaron el título de conde de Chalorais, Luisa Benedicta pasó a ser conocida como Mademoiselle de Charolais. Pero este título pasó más tarde a su sobrina Luisa Ana.

Era de conversación muy franca e ingeniosa, y de temperamento terrible. Cuando era muy pequeña, por prestar demasiada atención a su apariencia, fue llamada poupée du Sang en la corte francesa, literalmente "Muñeca de sangre", expresión que jugaba con la de princesse du sang, "princesa de sangre". Se dice a veces que este apodo se lo puso su cuñada, la duquesa de Borbón.[2]​ Estuvo muy ligada a su hermana María Ana, cuyo matrimonio con el duque de Vendôme (1654–1712) arregló ella más adelante y, aunque nació con un brazo débil, se la consideraba en general la más atractiva de las hijas Condé. A pesar de ello la duquesa de Orléans, cuñada de Luis XIV, la llamaba "pequeño sapo."[3]​ Algún tiempo después de su matrimonio, la duquesa de Orléans añadió que "Madame du Maine no es más alta que un niño de diez años y no está bien formada. Para aparecer tolerablemente bien es necesario que mantenga cerrada la boca, pues cuando la abre la abre mucho y muestra sus dientes irregulares. No es muy vigorosa, usa gran cantidad de pintura, tiene bellos ojos, una piel blanca y buen pelo. Si tuviera buena disposición, tendría un pasar, pero su maldad es insoportable".[4]​ Era de talla muy baja, como su hermana menor Ana María, señorita de Condé. Luisa Benedicta y su hermana mayor María Teresa de Borbón, conocida como señorita de Bourbon hasta su matrimonio con el Gran Conti en 1688, era considerada la más atractiva entre las hijas de los Condé.

Mademoiselle d'Enghien recibió la educación típica de las jóvenes nobles francesas y se le enseñó a leer, escribir, bailar, cantar y otras materias consideradas precisas para una joven aristócrata. Pasó la mayor parte del tiempo en compañía de su madre y de sus dos hermanas mayores.

Al principio se propuso su matrimonio con Luis de Borbón, conde de Vermandois, hijo de Luis XIV y Louise de La Vallière, pero el conde murió en el exilio en 1683. Luis XIV arregló varios matrimonios con casas principales de Francia para los hijos legitimados que tuvo con Louise de La Vallière. Antes de su matrimonio, vio el de Felipe de Orléans con Mademoiselle de Blois, futura duquesa de Orléans. El propio hermano de Luisa Benedicta, Luis de Borbón había sido obligado a casarse con Mademoiselle de Nantes, la hija mayor legitimada de Luis XIV y Madame de Montespan.

En 1692, una Luisa Benedicta de 15 años se casó con Luis Augusto de Borbón, légitimé de France, duque de Maine, de 21 años.

La ceremonia nupcial se celebró el 19 de mayo de 1692 en la capilla del Palacio de Versalles. No se invitó a Madame de Montespan, pero todos los hermanos de Maine acudieron, así como los príncipes y las princesas de sangre. Como tanto el novio y la novia tenían defecto físicos, los miembros de la corte bromearon diciendo que "¡He aquí la unión de una manca y un cojo. ¡Ah, qué bella pareja!".[5]​ No fue un matrimonio feliz. No se gustaban el uno al otro, Luisa Benedicta consideraba que su marido era débil y aborrecía su falta de ambición. Él no podía sportar su mal temperamento y los intentos deliberados de ponerlo en evidencia en la corte. Se dice que Luisa benedicta tuvo varios líos de los que Maine era consciente.[6]​ Se ha documentado que dijo a su esposo "Mírate, ¡un bastardo cojo! - ¿Y pretendes mandar en mi? Soy una princesa de pura sangre real, Señor, ¡sin la menor mancha en mi cuna! ¿Qué sería de ti sin los bastones de los que todo el mundo se ríe? Uno para apoyar tu cuerpo, y el otro, yo, para mantener tu rango. ¡Y este "piernas largas" quiere controlar mis pasos!" (Puesto que Maine cojeaba, su esposa lo llamaba 'Gambillard', lo que significa piernas largas).[7]

Para escapar de la aburrida corte de Madame de Maintenon, la esposa secreta de Luis XIV desde octubre de 1683, la entusiasta duchesse du Maine creó una pequeña corte en el Château de Sceaux, donde entretenía brillantemente y se sumergía en intrigas políticas. El château, anterior residencia de Jean-Baptiste Colbert y su familia, fue comprada en 1700 por su esposo por la suma de 900.000 libras tornesas. Luisa Benedicta gastó otras 80.000 libras en el mobiliario y la decoración.

Después de amplias renovaciones, pasó a residir allí en diciembre de 1700. Allí, empezó a ser llamada La Reine des Abeilles, o Reina de las abejas. En 1703, para entretenerse, Luisa benedicta creó su propia orden de caballería, la Orden de la Abeja Melífera. Dio la orden a 39 personas. Cada miembro tenía un vestido bordado con hilo plateado, una peluca en forma de panal y una medalla repujada con un perfil de Luisa Benedicta y grabada con las letras L. BAR. D. SC. D.P.D.L.O.D.L.M.A.M, que significaba Louise, baronne de Sceaux, dictatrice perpétuelle de l'ordre de la Mouche à miel[8][9]

A su pequeña corte, Luisa Benedicta atrajo una serie de figuras literarias de la época, incluyendo a un joven Voltaire, el barón de Montesquieu, el cardenal de Bernis, el comte de Caylus, Charles-Jean-François Hénault, Gabriel Bonnot de Mably y Jean-Baptiste Rousseau.

En 1710, ayudó a tramar el matrimonio de su hermana, María Ana, Mademoiselle de Monmorency, con el famoso general Luis José de Borbón, duc de Vendôme. Por razones puramente mercenarias, Luisa Benedicta quería un matrimonio que no produjera hijos. A la muerte de un Vendôme sin hijos, Luisa Benedicta esperaba que ella o sus hijos heredasen el enorme patrimonio del duque, que había adquirido como nieto de la rica heredera, Francisca de Lorena. Se creía que con 32 años, María Ana ya no estaba en edad de procrear, y Vendôme era un bien conocido homosexual, treinta años mayor que su novia. Lo que ocurrió, sin embargo, fue que Luis Benedicta no sacó nada. A la muerte del duque, María Ana fue nombrada duquesa de Étampes por derecho propio y heredó el Hôtel de Vendôme en París, donde murió en 1718 víctima de alcoholismo.

Los dos Maine mimaron a sus hijos. Su hija, que permanecería cercana a su madre hasta su muerte, fue bautizada en Versalles el 9 de abril de 1714. A Mademoiselle du Maine le dieron el nombre de su tía paterna Luisa Francisca de Borbón, conocida en la corte como Madame la Duchesse. Madame la Duchesse había crecido con Maine bajo el cuidado de Madame de Maintenon.

El invitado de honor en el bautismo de Mademoiselle du Maine fue el pequeño delfín, el futuro Luis XV, que fue cuidado por la otra hermana de Maine, la nueva duquesa de Orléans. El cardenal de Rohan bautizó a Mademoiselle du Maine. Gracias a la ayuda de Madame de Maintenon, que siempre había amado a Maine, Luis XIV hizo que Maine fuera un Prince du Sang lo que le puso en la línea de sucesión al trono. En su testamento, Luis XIV también nombró a Maine como Regente de Francia para su biznieto de cinco años, el futuro Luis XV.

A la muerte del rey en 1715, sin embargo, el Parlamento de París anuló el testamento de Luis XIV y nombró al cuñado de Maine, Felipe de Orléans, duque de Orléans, como Régent por el niño rey. Disgustada por esto, y el papel que tuvo el duque de Orléans a la hora de reducir el estatus de los hijos legitimados de Luis XIV del rango de Princes du Sang (que Luisa benedicta había disfrutado desde su nacimiento) a meros pares de Francia, Luisa Benedicta indujo a su esposo a unirse a la Conspiración de Cellamare con la esperanza de transferir la regencia al rey Felipe V de España, el tío de Luis XV. La trama recibió ese nombre por Antonio del Giudice, Duque de Giovinazzo, príncipe de Cellamare, que era el embajador español en Francia.

Para obtener más apoyo para un nuevo regente, Luisa Benedicta comenzó correspondencia con Giulio Alberoni, el primer ministro español. Entre los conspiradores estaban el duque de Richelieu y Melchior de Polignac. La trama, sin embargo, fue descubierta, y los dos Maine fueron arrestados y obligados a abandonar su residencia en Sceaux. En 1719, el duque fue apresado en la fortaleza de Doullens y la duquesa en Dijon.

Sus dos hijos fueron puestos bajo la guardia en Gien, y su hija fue llevada de un convento en Maubuisson a otro convento en Chaillot en París, en la zona de lo que ahora es Trocadéro. Permaneció en Chaillot hasta 1720 cuando sus padres fueron liberados de sus prisiones separadas. Después de su liberación, Luisa benedicta llevó una vida más pacífica en Sceaux, aún rodeada por su pequeña corte. En la época de su prisión, estaba intentando arreglar el matrimonio de su hijo mayor, Luis Augusto, heredero de la fortuna de Maine, con su prima Carlota Aglaé, Mademoiselle de Valois.

La rivalidad entre los Maine y el padre de Carlota Aglaé, el duque de Orléans, era bien conocida, y se esperaba que con esta boda se curaran viejas heridas. Sin embargo, este matrimonio no tuvo lugar, pues la joven Mademoiselle de Valois rechazó a su primo, para gran disgusto de la orgullosa Luisa Benedicta. Madame du Maine no se sintió feliz cuando descubrió que Carlota Aglaé había considerado la mano de otro primo, Carlos de Borbón, el hijo de Monsieur le Duc, el hermano de Luisa Benedicta, y Madame la Duchesse, la hermana de Maine.

Después de ser liberada de la prisión en 1720, los Maine parece que se reconciliaron y llevaron una vida más compatible, en vez de ser hostiles el uno con el otro. En mayo de 1736, el duque murió a la edad de 66 años.[10]​ Luis XV permitió a Luisa Benedicta mantener sus apartamentos en Versalles cerca de los de su hija. Estos apartamentos daban a la Orangérie. Sus dos hijos tuvieron también apartamentos en la corte, pero ambos preferían permanecer en el campo, cazando. Madame du Maine intentó en más de una ocasión arreglar un matrimonio ventajoso para su hija. Primero con un señor de Guisa, pero ese matrimonio nunca se materializó. Más tarde, intentó convencer al viudo Jaime I de Mónaco, que a menudo estaba en Versalles, para que se casara de nuevo. A pesar del atractivo de una gran dote, ambos hombres consideradon que Mademoiselle du Maine era muy poco atractiva. Soltera, murió en 1743. Está enterrada en la iglesia de Sceaux. En el momento de su muerte, su librería ascendía a más de tres mil libros.

En 1736 Luisa Benedicta recibió el Château de Montrond y después, en 1737, adquirió el Hôtel Biron (hoy el musée Rodin), en París, donde murió. En vida, se le llamaba el Hôtel du Maine. Ella murió en el Hôtel du Maine el 23 de enero de 1753. Muriendo a la edad de 76 años, Luisa Benedicta sobrevivió a todas sus hermanas. Está enterrada en la iglesia de San Juan Bautista de Sceaux. Su hijo mayor, Luis Augusto, murió menos de dos años después, habiendo resultado herido en un duelo en Fontainebleau. Su hijo más joven, Luis Carlos, nunca se casó y murió sin hijos en 1775. Dejó su fortuna a su primo carnal, el ya de por sí rico Luis Juan María de Borbón, duque de Penthièvre.



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