x
1

El Héroe



El Héroe (1637), es el primero de los libros publicados por Baltasar Gracián, un tratado en el que se propone describir el ideal de hombre excepcional.

Se trata de un tratado perteneciente al género de la prosa didáctica que señala las virtudes y cualidades morales que debe tener quien aspire a ser reconocido por sus valores entre sus semejantes. Con esta obra Gracián comienza una obra incardinada en la filosofía moral.

Esta obra entronca con el El Príncipe de Nicolás Maquiavelo por un lado, como manual de buen gobierno o de espejo para príncipes, planteando el gobierno en el terreno de la reacción de la propia persona. Pero esta «razón de estado» de uno mismo no llegará hasta el punto de olvidar la virtud, pues ha de recordarse que en la España de la Contrarreforma al príncipe maquiavélico se opuso un príncipe cristiano, como pregona el título de la obra de Diego Saavedra Fajardo, Idea de un príncipe político cristiano. Por otro lado, El Héroe conecta con El Cortesano de Baltasar de Castiglione, pero no basta con los modos cortesanos ya en esta época, es necesario un fondo de inteligencia y astucia. Tanto el título (El Héroe) como el nombre de sus capítulos (primores), no tienen el exacto sentido que le damos hoy. El juego con las acepciones etimológicas de las palabras será habitual en gracián, y así, héroe, remite a la cualidad máxima del varón clásico, esto es, la «virtus» latina o la «αρετη» griega, que se daban en ciudadanos relevantes de la sociedad.

Escrito a los 36 años de edad, el estilo de su primera producción literaria refleja ya una gran madurez. En él se da ya la frase sentenciosa y concisa que caracteriza la escritura graciana.

La obra fue publicada con el nombre de su hermano Lorenzo Gracián. Recientemente la Biblioteca Nacional adquirió un ejemplar de la edición príncipe de esta obra impresa en Huesca, por Juan Antonio de Larumbe en 1637, por lo que las ediciones antes de ese hallazgo recurrieron casi siempre a tomar como base la segunda, aparecida en 1639. Se conserva también un manuscrito autógrafo en la Biblioteca Nacional de Madrid, que precede a la primera edición. Este difiere en bastantes lugares de las versiones impresas conservadas, y de su cotejo, donde se aprecian constantes correcciones, se deduce que pulía la obra con sumo detenimiento. Gracián dedicó el autógrafo y la edición de Huesca de 1637 al rey Felipe IV, en cambio la edición madrileña de 1639 va dedicada a Lastanosa. El cambio de la dedicatoria determina un nuevo propósito para el, pues lo que iba ser un texto perteneciente al género llamado “Espejos de príncipes”, por estar dedicado al soberano, acabó teniendo un destinatario más general. Este destino se muestra en la advertencia al lector que antecede a la edición de 1639:

El título de El Héroe es ya indicativo del tipo de persona que presenta como modelo y ejemplo Gracián: un hombre fuera de lo común, que posee las cualidades más sublimes. El libro entronca con la tradición de El cortesano, de Baltasar de Castiglione, aunque Gracián, jesuita y filósofo moral, destaca las cualidades interiores sobre la gala y el comportamiento en sociedad, que son mucho más importantes en el tratado de cortesanía del humanista italiano.

Los veinte capítulos en los que se divide la obra reciben el título de primores. Estos se podrían entender como capacidades del hombre en grado de excelencia. Además se juega con el sentido etimológico de “primus” (primero). Las cualidades de este hombre relevante son las más altas, primeras entre todos sus semejantes.

A esa estructura externa, basada en el número cinco, que constituía un recurso mnemotécnico muy utilizado por los jesuitas (pues este número es el de los dedos de la mano), podríamos añadir otra estructura interna, la de la construcción de una biografía política, tal y como lo había hecho su admirado Justo Lipsio en el Panegírico de Trajano, extraído de la obra de Plinio el Joven. Como quiera que fuere, la crítica coincide en la deuda de Gracián con el texto plineano.

El contenido de los primores gracianos muestra una estructura común: una primera parte de carácter teórico es seguida de una batería de ejemplos históricos. Las cualidades o primores más importantes de este hombre de excepcional valía serían, saber soportar los cambios de la fortuna, así como aprovecharse de ella cuando la ocasión viene favorable, el arte de conocerse a sí mismo y a los demás, la capacidad para aparecer ante los demás como persona de gran carisma y, sobre todo, las relacionadas con el alcance de la virtud (primor XX).

En los primeros capítulos de El Héroe, las prendas o capacidades tienen que ver con cualidades innatas, como la inteligencia o la perseverancia; en los siguientes aparecen las adquirida: tener educado el gusto o saber manejar la suerte, conocer el interior de las personas y sus intenciones, adquirir saber y tener una experimentada experiencia... Así lo probaría el siguiente texto del final del tercer primor: “Hasta aquí, favores de la naturaleza; desde aquí, realces del arte” (El Héroe, II.). Describe los dos tipos de cualidades en el primor VI:

Tras la edición príncipe de 1637 de Huesca, hubo una edición posterior de Madrid, de 1639, de la que al parecer hubo una réplica contrahecha. Se conserva, además, un autógrafo de mano del propio Baltasar Gracián, que ayuda en la corrección de algunas lecciones dudosas.

También en los preliminares de El Discreto nos indica, en su dedicatoria «Al príncipe Baltasar Carlos», que El Héroe estuvo en la Biblioteca Real de Felipe IV:

A partir del XVII fue editado con otras obras (habitualmente el Oráculo manual y arte de prudencia o El Discreto) o formando parte de sus Obras Completas. No sería hasta el siglo XX en que volvería a editarse suelto en la edición de Adolphe Coster de 1911,[2]​ a partir de la cual el interés por esta obrita ha ido en aumento.

El Héroe fue traducido pronto al francés, en 1645,[3]​ lo que se ve reflejado en los prolegómenos de El Discreto. Otras tres traducciones al francés, dos al inglés (la más temprana de 1652) y una al portugués muestran un mediano éxito editorial ya en el siglo XVII.

El autógrafo del héroe y las ediciones más antiguas conocidas están reproducidas en edición facsímil en:



Escribe un comentario o lo que quieras sobre El Héroe (directo, no tienes que registrarte)


Comentarios
(de más nuevos a más antiguos)


Aún no hay comentarios, ¡deja el primero!