x
1

Huasco Bajo



Huasco Bajo es una localidad chilena, perteneciente a la comuna de Huasco, Provincia de Huasco, Región de Atacama. Dista 4 km de Huasco,[2]​ capital comunal y 185 km de Copiapó, capital regional. Se encuentra entre a la ruta C-46 que une Vallenar con Huasco y a la ribera sur del río Huasco.[3]

Este poblado rural cuenta con una sencilla iglesia y casas dispersas entre plantaciones de olivos.

En el año 1536, el descubridor de Chile continental don Diego de Almagro en su sacrificado paso al centro del país, toma contacto en este lugar conocido como "Pallantume" con una importante población indígena.

En este antiguo asentamiento indígena hacia 1500 tenía su residencia el cacique Marican o Maricande, nombrado de esta forma por el historiador Luis Joaquín Morales, médico y escritor, nacido en esta localidad. Marican fue instalado en este puesto por el Imperio incaico que habían conquistado la zona en su favor y tenía autoridad sobre los caciques Coluba, Atuntaya y Moroco. Coluba, quien tenía el rango de segundo jefe, atendía la zona de Carrizal, Bahía Salada y Canto de Agua. Atuntaya y Moroco se repartían los territorios de Paitanás (Vallenar) y el interior del valle, hasta la cordillera.

Por lo tanto, Huasco Bajo, es el asentamiento aborigen de más importancia del valle en la época pre hispánica, donde habitaron las culturas molle, diaguita y picunche, con gran relación con los habitantes de la costa, los changos.

Durante la colonia este poblado se empleó para apoyaba el cercano puerto de Huasco y facilitar la colonización y evangelización del valle del Huasco.[4]

En el año 1633 se construye la primera iglesia del valle del Huasco, en la aldea San Francisco de Huasco Bajo, que luego en el año 1933 fue reemplazada por la actual Iglesia Nuestra Señora del Rosario.

Su economía básica es la olivicultura. Famosa es la aceituna producida por esta localidad, como igualmente la extracción de aceite de oliva, productos que a gran escala son cosechados en los grandes fundos y huertos familiares.

Esta localidad tiene aroma pueblerino, de gente esforzada, gentil y sencilla. Cuenta con una capilla llamada Nuestra Señora del Rosario, del año 1933, ubicada frente a su plaza.

Recorrido por olivos centenarios entre Huasco y Freirina, cuenta la historia de la ciudad y su pasado, degustando la gastronomía y los sabores del Huasco, como los exquisitos camarones de río. Destacan añosos olivos que datan desde el siglo XIX, los que han permitido desarrollar productos con identidad propia, se puede visitar las plantas aceiteras industrial, semi industrial y artesanal de aceite de oliva regional.[5]​ Un reciente estudio realizado el año 2016 determinó que algunos ejemplares de olivos en Huasco Bajo fueron plantados hace más de 400 años,[6]​ es decir, en los primeros años de este asentamiento.

En sus inmediaciones se ubica el acceso a las playas y balnearios de la Costa de Huasco, así como del Humedal formado en la desembocadura del Río Huasco, rico en fauna silvestre.

La localidad posee la Escuela El Olivar (F-101) que fue entregada a la comunidad el 26 de agosto de 1992 y reemplazó a la anterior Escuela Co-educacional Nº6 de Huasco Bajo que data del 24 de junio de 1870, funcionando por ende 122 años. Actualmente este antiguo edificio cubierto de pino oregón está siendo restaurado.



Escribe un comentario o lo que quieras sobre Huasco Bajo (directo, no tienes que registrarte)


Comentarios
(de más nuevos a más antiguos)


Aún no hay comentarios, ¡deja el primero!