La Ilustración Católica

La Ilustración Católica fue una revista cultural española impresa en Madrid entre 1877 y 1894.

Se publicó desde el 5 de agosto de 1877 hasta 1894, último año del que se tiene constancia de la existencia de números.^[1]​^[2]​ En un principio tenía una periodicidad semanal, apareciendo todos los domingos,^[1]​ aunque más tarde pasó a publicarse cada diez días —el 5, el 15 y el 25 de cada mes—^[1]​ e incluso en sus últimos años de forma quincenal.^{[n 1]}​ Incluía numerosos grabados, uno de ellos siempre en la primera página, que bien recogían retratos de personalidades importantes relacionadas con la Iglesia católica o bien arte religioso.^[1]​

Se destacó por sus críticas a la novela de la época,^[3]​ la indiferencia hacia literatos de éxito de corte liberal y su enfoque en autores cristianos.^[4]​ Su línea editorial hacía hincapié en los problemas que supuestamente conllevaba la lectura,^[5]​ posicionándose en contra de «la literatura venenosa y ruin de los dramaturgos y novelistas franceses, corruptores de las costumbres cristianas»^[6]​ y en general de la cultura francesa,^[7]​ además de condenar los avances de la ciencia y la técnica.^[7]​^[1]​

En ella participaron autores como Valentín Gómez,^[8]​ Manuel Pérez Villamil,^[2]​^[8]​^[9]​ Francisco Navarro Villoslada,^[8]​ Antonio de Valbuena,^[8]​ Ceferino Suárez Bravo,^[10]​ Gabino Tejado,^[11]​ Manuel Ossorio y Bernard,^[2]​ Ángel Salcedo y Ruiz,^[2]​ José Selgas,^[12]​ Luis Coloma,^[1]​^[13]​ José María de Pereda^[1]​ o Manuel Polo y Peyrolón.^[14]​

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