Lo infraordinario (en francés, L'Infra-ordinaire) es un libro póstumo del escritor francés Georges Perec (1936-1982), publicado originalmente en Francia en 1989 en la colección «La Librairie du XXIe siècle» de Editions du Seuil dirigida por Maurice Olender.
Fue traducido por primera vez al castellano por Mercedes Cebrián en 2008 para la editorial Impedimenta, incluyendo una introducción de Guadalupe Nettel. Por esta traducción Cebrián obtuvo el Premio Mots Passants de Traducción, así como el Premio Tormenta en un Vaso 2009 al mejor libro traducido del año. En 2013 se volvió a editar en castellano, esta vez para la editorial argentina Eterna Cadencia, con traducción, prólogo y notas de Jorge Fondebrider.
El libro, parecido al también póstumo Pensar/Clasificar (1985), corresponde a una compilación de diversos textos que el escritor publicó en periódicos y revistas entre 1973 y 1981, que versan sobre la observación minuciosa y asombrada de lo cotidiano, y del cuestionamiento de aquello que no suele cuestionarse.
El libro está conformado por 8 textos. El primero de ellos, colocado allí a modo de introducción, se asemeja a una especie de manifiesto. El segundo está dividido en seis secciones numeradas, cada una de las cuales, como en un diario personal, posee la fecha exacta y hora aproximada en que ha sido observado aquello que se está describiendo. El tercer texto, dedicado al escritor italiano Italo Calvino, corresponde a una lista no enumerada de 243 textos de tarjetas postales, todas ellas con una estructura muy similar y de alrededor de tres líneas de extensión. El texto siguiente está escrito en segunda persona plural y como si el narrador fuera un guía turístico. El siguiente texto trata una temática similar al anterior, pero esta vez está escrito en primera persona, variando entre el singular y el plural, y el narrador adopta un tono más personal. El siguiente es un texto breve, que es sucedido a continuación por una lista no numerada de diversos elementos alimenticios. El último texto no posee puntos aparte, a juzgar por su contenido ha sido escrito alrededor de las 10:00 hrs., y en su contenido remite explícitamente a un borrador escrito a las 12:50 hrs., de modo que se vuelve a repetir una segunda vez el mismo texto pero con ligeras variaciones.
El libro cierra con una breve sección de referencias bibliográficas, que indica dónde se publicaron inicialmente cada uno de los textos que conforman la obra.
La primera versión en castellano, por su parte, incluye una introducción de Guadalupe Nettel, titulada «Descifrar el espacio» y en la cual se refiere a distintos aspectos tanto del autor como de su obra. Esta introducción viene sucedida de una breve «Nota de la traductora» en que Mercedes Cebrián explica su satisfacción por haber podido traducir este libro, no sin dificultades y recibiendo la ayuda de Nere Basabe, Alex Baurès, François Depersin, Patricia Esteban, Azucena López Cobo, Isabelle Marchesin, Daniel Samoilovich y Stéphane Tirard.
Para muchos escritores, este libro es una demostración de la gran lucidez literaria de su autor.
La traducción al castellano realizada por Mercedes Cebrián fue premiada con el Premio Mots Passants de Traducción y con el Premio Tormenta en un Vaso 2009 al mejor libro traducido del año.
Para Guadalupe Nettel, las temáticas abordadas por este libro lo asemejan a procedimientos del arte contemporáneo practicados por Sophie Calle o Daniela Franco.
Unos años después de su publicación en este libro, el texto «243 Cartes postales en couleurs véritables» fue traducido al sueco por Magnus Hedlund como «Tvåhundredfyrtiotre vykort», y presentado como obra de teatro en Estocolmo entre octubre y diciembre de 1991, bajo la dirección de Magnus Florin.
Escribe un comentario o lo que quieras sobre Lo infraordinario (directo, no tienes que registrarte)
Comentarios
(de más nuevos a más antiguos)