San Pedro (Misiones)

San Pedro es una ciudad argentina de la provincia de Misiones y cabecera del departamento homónimo.

Se encuentra ubicado a una latitud de 26° 37' Sur y una longitud de 54° 06' Oeste. Cuenta con una población de 31.050 habitantes según el Censo 2010 (INDEC).

La principal vía de comunicación con otras ciudades de la provincia es la Ruta Nacional 14. Tiene la particularidad de ser el único municipio de su departamento, por esto ocupa la totalidad de su superficie, algo que no ocurre en ningún otro departamento de la provincia.

El municipio posee una gran cantidad de araucarias (pino Paraná) de la especie llamada localmente cury, un árbol protegido por las leyes de Argentina, por lo que no puede ser talado. Para cuidarlos se ha creado el Parque Provincial de la Araucaria, además cuenta con gran cantidad de otros parques y reservas (Parque Provincial Moconá, Reserva de Biósfera Yabotí, Parque Provincial Cruce Caballero, Parque provincial El Piñalito, etc.). Dentro del municipio se encuentran los núcleos urbanos de Paraíso, Cruce Caballero, Tobuna y Piñalito Sur, todos sobre la ruta Nacional N.º 14.

En la noche del 7 de septiembre de 2009, una zona cercana a Tobuna conocida como paraje Santa Rosa, fue arrasada por un tornado categoría EF4 . El mismo provocó la muerte de 12 personas y heridas en más de 50. Muchas casas del pueblo fueron destruidas, algunas levantadas por el aire con sus ocupantes dentro, otras con daños menores perdieron sus techos. Las producciones animales y vegetales quedaron destruidas y el monte fue devastado. La solidaridad del pueblo de San Pedro, del resto de la Provincia de Misiones y de todo el país no se hizo esperar y por medio de donaciones pudo paliarse algunos de los daños ocasionados por el fenómeno meteorológico.

Contaba con 31,051 habitantes (Indec, 2010) mujeres 14.836 y hombres 16.215. Comparando con 6,333 habitantes (Indec, 1991) del censo anterior. Esto la sitúa como la decimotercera unidad más poblada de la provincia con una densidad de población de 9,1 hab/km².

En la zona cobra auge el turismo. En este municipio se encuentran los Saltos del Moconá, que si bien están dentro del departamento de San Pedro, están ubicados en el límite con el departamento de Guaraní, y están más asociados al municipio de El Soberbio que al de San Pedro, debido a que es más cercano y posee mejor acceso a los saltos.

Institución educativa Pública de gestión privada de la localidad de San Pedro, Provincia de Misiones Argentina, gestionada por las Hermanas Franciscanas Misioneras de la Madre del Divino Pastor desde su fundación en el año 1965. Basado en los valores de San Francisco de Asís, brinda formación tanto a niños como a jóvenes de la región ya que cuenta con dos salas de 4 años, dos secciones de 5 años, catorce secciones de Nivel Primario y diez de Nivel Secundario siendo la única institución de la región que cuenta con todos los niveles de manera que los alumnos pueden iniciar la escuela primaria y continuar hasta la finalización de la secundaria en la misma institución, cumpliendo así con toda la escolaridad obligatoria según lo establecido en la Ley de Educación Nacional N° 26206.^[1]​

El actual Instituto San Francisco de Asís n.º 116001 comenzó a funcionar como tal en el año 1965. Sin embargo, como antecedente más inmediato se cuenta la creación en el año 1963, de la Escuela Parroquial San Pedro con Jardín de infantes y Primero Inferior coordinada por el Padre Mariano Kiernarski y que funcionaba en el edificio del antiguo Club Social que se encontraba a pocos metros de donde actualmente se encuentra el Instituto y donde actualmente se encuentra el predio de Gendarmería Nacional. Inicios: El 15 de marzo de 1965 el Instituto San Francisco iniciaba formalmente sus actividades, cuando las Hermanas Franciscanas Misioneras de la Madre del Divino Pastor se hacen cargo de dicha Escuela. Ese año abre sus puertas a niños desde Jardín de Infantes a tercer grado, en lo que hoy es el predio de Gendarmería. Las hermanas que estaban a cargo eran Joaquina Sanz, María del Carmen Morínigo, Carmen Pascual y Teresa Basualdo. La cantidad de alumnos era creciente. Debido a ello, ya en el año 1966, y gracias al esfuerzo de toda la comunidad educativa, se da inicio a las clases en el nuevo edificio de madera, mucho más amplio y cómodo, construido en el terreno donde se encuentra el colegio hasta la actualidad. Historia reciente: Desde entonces fue creciendo de acuerdo a las demandas de la comunidad sampedrina, acompañando a las familias en la misión de educar, superando dificultades y unidos en la fe, la oración y la acción. En 1974 se construyeron las primeras aulas de ladrillos y en 1993 se inauguró el nuevo edificio de material que reemplazó al de madera. En el año 2003 egresó el primer grupo de alumnos del nivel medio, siendo esto un sueño muy anhelado por las familias de San Pedro. Actualidad: actualmente sigue desarrollando su labor educativa y pastoral en la comunidad de San Pedro, siendo una de las escuelas más importantes de la región y presente en múltiples actividades educativas, sociales y religiosas. Además de la educación formal que incluye informática e inglés desde 4º grado de primaria, se desarrolla con alumnos y docentes, actividades como campamentos, viajes de estudios, misas, retiros, jornadas de reflexión, proyectos y campañas solidarias. A su vez, desde el año 2013 se incorporó una Formación Profesional en Informática para los alumnos que cursen el 3º año del nivel secundario, y este año, dicha formación se extendió a la comunidad. Este año 2015, el Instituto celebra sus bodas de Oro. Con sus 50 años de trayectoria el Instituto San Francisco sigue caminando a la luz del Evangelio y brindando a niños y jóvenes una formación integral basada en los valores cristianos, con el carisma de la Madre María Ana Mogas y San Francisco de Asís tras las huellas del Buen Pastor.

En agosto del año 1974 se instaló la primera “colonia” en lo que hoy es llamada “Colonia Primavera”, San Pedro, Misiones. Doña Clara Jorgelina Bellot- De León (alias Pepa) llegó a San Pedro en busca de un lugar para instalarse y comenzar a construir una “chacra” ¹. Encontró un terreno fiscal a 12 km del pueblo, a orillas de una picada de obraje, de la que hoy es el camino principal de “Colonia Primavera”.

En esa época no existía ninguna casa o colono por esa picada. Era un camino feo, solo usado por máquinas de obrajes y camiones que sacaban madera de los obrajes situados lejos, al fondo de ella, selva adentro. Los únicos habitantes en esa “picada”, eran dos brasileños que habitaban en chozas y vivían de la caza y la pesca.

Doña Pepa se instaló allí con sus gallinas, chanchos, animales vacunos y perros. Inmediatamente comenzó a trabajar la tierra. Así formó su “chacrita”. Al poco tiempo de haberse instalado allí, se desató un gran incendio en los bosques a varios kilómetros de su chacra, monte adentro, hacia los obrajes. Los camioneros que huían del incendio le avisaron de ello, le pidieron que abandonara su chacra y que se fuera con ellos al pueblo porque el incendio avanzaba hacia allí. Doña “Pepa” se negó rotundamente a abandonar su chacra y sobre todo a sus animales. Los camioneros no pudieron convencerla de que salga con ellos al pueblo, y allí quedó ella sola, con un nietito de cuatro años que en ese momento le hacía compañía y sus animales.

El incendio avanzó rápidamente hacia el pueblo y antes de que sus familiares y conocidos pudieran ir a rescatarlos, el fuego les corto el camino. Impacientes esperaron a que se apagara el incendio, y se enfriaran las brazas lo suficientemente, como para poder entrar en su búsqueda. Todos los dieron por muertos. No sobrevivirían la furia de las llamas que alcanzaban más de 20 metros de altura.

Cuando al fin pudieron entrar, la encontraron tanto a ella, como a su nieto y a sus animales en perfectas condiciones. Ni su casita se había quemado. ¿Cómo lo había hecho?; aplicó el método de “contrafuego” y luego se refugió junto con los animales y su nietito en un bañado cercano. El fuego pasó destruyendo todo, menos el lugar a donde ella estaba instalada. El incendio destruyó kilómetros de selva. Desde el pueblo hasta unos 25 kilómetros monte adentro. La tierra quedó limpia. De lo que fueron árboles gigantes solo quedaron las cenizas y alguno que otros troncos semiquemados. De los pinos Paraná solo quedaron algunos de sus esqueletos, formados por los llamados “clavos de pino” que forman la columna vertebral del árbol.

Al correr la noticia del incendio por pueblos como Campo Grande, de donde provenía Doña Pepa, Campo Viera, Aristóbulo de Valle, etc., comenzaron a arribar los primeros colonos. Rápidamente se fueron distribuyendo las tierras quemadas y cada uno comenzó a cultivar la tierra hasta convertirla en lo que hoy es la floreciente “Colonia Primavera”.

Actualmente ese niño (Jorge Atilio, De Leon) es el jefe del cuartel de BOMBEROS VOLUNTARIOS de SAN PEDRO.

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