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God of War



God of War (literalmente en español Dios de la Guerra) es una serie de videojuegos en 3ª. persona creada por SCE Santa Monica Studio y distribuida por Sony Computer Entertainment. Se basa en las aventuras de un semidiós espartano, Kratos, quien se enfrenta a diversos personajes de la mitología griega y nórdica, tanto héroes (Heracles, Teseo, Perseo, etc.); especies mitológicas (gorgonas, arpías, o minotauros); dioses griegos (Ares, Poseidón, Zeus, entre otros), titanes (como Cronos) y dioses primordiales (como Gaia). Aunque el guerrero espartano acostumbra enemistad con la mayoría de los dioses, recibe ayuda de muchos de ellos en algún momento de cada entrega, en especial de Atenea.

Los juegos están disponibles para las consolas PlayStation 2, PlayStation 3, PlayStation 4, PlayStation Portable, PlayStation Vita y también para teléfonos móviles. Se han realizado remasterizaciones de los primeros juegos para jugarse en consolas modernas, por lo cual hasta el día de hoy, seis de los ocho títulos están disponibles para PS3, a excepción de God of War: Betrayal y God of War de 2018. El día 11 de noviembre de 2020 se informó que la saga había superado los 51 millones de copias totales,[1]​ situándola como una de las 3 sagas más importantes de la marca de Sony Interactive Entertainment, junto a Uncharted y Gran Turismo

La infancia de Kratos es explicada durante el desarrollo del primer juego. Es maltratado, como solía hacerse a los niños altos y fuertes en la antigua Grecia. A su hermano, al tener una marca que el oráculo predijo que portaría el que causara la perdición del Olimpo, Ares lo secuestra y lo lleva al reino de la muerte.

Después de recibir entrenamiento, Kratos, ya casado y con una hija, Calíope, se convierte en un gran general del ejército espartano y prometió no detenerse hasta que la gloria de Esparta estuviera en lo más alto. Las tácticas de sus ejércitos eran brutales, pero muy efectivas. Sin embargo, un día, un enfrentamiento contra el ejército bárbaro dio un resultado adverso para su armada. Con su ejército destruido y a punto de ser asesinado por el líder bárbaro, Kratos pide la ayuda de Ares, el dios de la guerra, ofreciéndole su vida a cambio. El dios desciende de los cielos y acaba con todos los enemigos, luego entrega a Kratos las Espadas del Caos que son adheridas a sus brazos por cadenas.

El guerrero espartano sucumbe totalmente al poder de Ares, quien le exige ciertas tareas de destrucción y conquista. Las tácticas del ejército de Kratos son aún más brutales que antes, asesinando sanguinariamente a cualquiera que opusiera alguna mínima resistencia. En una de sus misiones, Kratos debía quemar una aldea que se oponía a la armada de Esparta. En su afán de sangre y conquista, Kratos quiso ingresar al templo de la aldea, el oráculo le advierte que no debía entrar, sin embargo la hace a un lado e ingresa, asesinando a todos los presentes. Cuando lanza por última vez sus espadas hacia sus víctimas, entiende que había asesinado a su esposa e hija. Kratos queda devastado y como castigo por tal acción y brutalidad, tendría adheridas sobre su piel las cenizas de su esposa e hija por la eternidad; aunque Ares le explica que hizo eso para que no tenga ningún lazo afectivo y poder convertirlo en el guerrero perfecto, aun así, el guerrero espartano renunció a seguir siendo el súbdito del dios de la guerra.

Al querer romper el pacto de sangre con Ares, las furias, encargadas de castigar a los que cometieran dicha acción, comenzaron a hacerle ver visiones a Kratos. Orkos, hijo de las furias, traiciona a sus madres y a su padre Ares al descubrir que planeaban destronar a Zeus del mandato del Olimpo, por lo que avisa al espartano del hechizo que sufría y que debía alcanzar el oráculo de Delfos para conocer la verdad. A pesar de los intentos de Pólux para que el oráculo muriera y no pudiera ver a Kratos, el guerrero logra descubrir su propósito antes que el oráculo falleciera. Este le avisa que solo encontrando los ojos de la verdad podría romper el encanto de las furias.

Una vez alcanzado dicho elemento, las furias descubren a Orkos, quien ayudaba a Kratos e intentaba avisarle de la presencia de sus madres y toman como prisionero al espartano quien más adelante rompe las cadenas logrando escapar. Las furias le ofrecen vivir en una ilusión en la que su hija y esposa estarían vivas junto con él, pero Kratos prefiere vivir la verdad, combatiendo y asesinando a las hermanas. Al regresar a su casa en Esparta, Orkos le avisa que no se liberó del pacto con Ares, ya que las furias lo habían convertido a él guardián de los pactos de sangre por lo que le pide a Kratos de asesinarlo. A pesar de oponer resistencia, entiende que es lo mejor y le da al hijo de las furias una muerte honorable como había pedido.

Sin embargo, al romperse el lazo con el dios de la guerra, las visiones sobre su pasado, sobre los asesinatos a inocentes y a su familia y sobre sus brutales técnicas en el campo de batalla se vuelven algo cotidiano. Decide quemar su casa y dejar Esparta para redimirse por su pasado sirviendo a los dioses en busca de que estos eliminen las visiones que lo atormentan.

Kratos, siguiendo la palabra de los dioses, realiza todo tipo de tareas. Es enviado por los dioses a la costa de Ática para detener el avance de los persas.

Tras parar el ataque de los persas y asesinar al Basilisco, Kratos no tiene suficiente y reclama a los dioses más y más faenas y es cuando ve que el Sol cae contra la Tierra sumiendo el mundo en oscuridad. Se dirige hacia la zona de la colisión cerca de la ciudad de Maratón. Al llegar, la ve envuelta por una niebla de donde surgen enemigos y el Gran Carro de Helios, dios del Sol. Kratos se abre paso entre las diversas criaturas que invaden la ciudad y logra alcanzar el carro y tras escalarlo, Atenea se presenta como una estatua y comunica a Kratos que Morfeo ha lanzado su manto y está sumiendo a los dioses en un profundo sueño. Sin un Sol que ilumine Morfeo no tiene límites. Kratos tiene una nueva misión: devolver el Sol al cielo. Se adentra en el Templo de Helios y tras un corto camino se topa con Eos, que comunica a Kratos que su hermano,helios, había sido secuestrado por Atlas y que se encuentra en el Hades. Kratos se adentra en el Inframundo en busca de Atlas pero allí ve a su fallecida hija, Calíope. Kratos sigue su rastro y finalmente se topa con Perséfone, esposa de Hades y reina del Inframundo. Perséfone ofrece a Kratos la oportunidad de expiarse de sus pecados para descansar en paz con su hija. Kratos acepta y pierde sus poderes a cambio de estar con su hija en los Campos Elísios. Al fin, Kratos abraza a su querida hija pero Perséfone acaba el reencuentro porque ella era la verdadera artífice del plan para liberar a Atlas y éste, con los poderes del Sol en sus manos, destruiría el enorme pilar que sostiene la Tierra y así acabaría con el Olimpo de una vez por todas mientras los dioses duermen por culpa de Morfeo. Kratos se da cuenta de su error y decide, aunque sea muy doloroso, separarse de su hija y recobrar sus poderes de la única forma que sabe: matando a los muertos inocentes y siendo otra vez el fantasma de Esparta. Tras una encarnizada lucha contra Perséfone, el gran titán Atlas entra en la batalla tratando de aplastar a Kratos. Después de encadenar los poderosos brazos del titán se decide terminar con Perséfone. Kratos logra terminar con ella pero antes de irse Atlas le dice que los olímpicos no le ayudarán. Kratos responde que los servirá fielmente. Atlas acaba la conversación diciendo que se volverán a ver. Atlas siempre sostendrá el mundo sobre sus hombros, un castigo peor que el que Zeus impuso a los otros titanes. Así es como Kratos retornó el Sol al cielo y Morfeo se retiró a las sombras. Finalmente, Kratos se lanza del carruaje quedando inconsciente sobre la montaña más alta de toda Grecia pagando un alto precio incluso para el fantasma de Esparta.[2][3]

El primer videojuego de la saga comienza con el guerrero en un barco luchando contra la hidra por encargo del dios de los mares Poseidón. Previo a llegar a Esparta, Kratos sale a la cubierta en plena lluvia y le reprocha a Atenea que después de diez años de servicio los dioses no habían cumplido lo prometido. La diosa le dice que aún faltaba una última misión: Ares estaba destruyendo Atenas por lo que la diosa de dicha ciudad le pide a Kratos que detenga al dios de la guerra en su paso de destrucción ya que Zeus decretó que los dioses no podían luchar entre ellos.

Kratos llega a Atenas luego de combatir con un gran número de soldados no muertos, gorgonas y minotauros, entre otros seres mitológicos. Luego de salvar al oráculo de Atenas de la muerte, Atenea le revela a Kratos que la única forma de que él pudiese asesinar a Ares era consiguiendo la caja de Pandora que se encontraba en el Templo de Pandora, encadenado a la espalda del titán Cronos en el Desierto de las almas perdidas. El semidiós supera el desierto e ingresa en el templo repleto de laberintos y enemigos. Finalmente consigue la caja pero es asesinado por Ares quien al enterarse que el espartano había cumplido su misión, lanza una gran estaca de piedra que le atraviesa el cuerpo. A pesar de ello, vuelve desde el Inframundo, llega donde estaba el dios de la guerra y mientras este hacía notar su victoria a Zeus, aprovecha para quitarle la caja y abrirla. Kratos crece considerablemente y combate a Ares, a quien finalmente asesina. Pero después de su gran tarea, Atenea le admite que ningún héroe, guerrero o incluso dios podía olvidar lo que él había hecho. Totalmente desanimado, Kratos se lanza de la montaña más alta de toda Grecia con el fin de suicidarse, pero al caer al abismo no muere sino que se levanta hasta el lugar donde se lanzó, allí Atenea le explica que si bien Ares está muerto, el puesto de dios de la guerra quedó vacante, por lo que le ofrece un puesto entre los dioses como el nuevo dios de la guerra. Kratos acepta convirtiéndose en un miembro del Olimpo.

Tras los acontecimientos del primer God of War, Kratos está al frente de su ejército espartano con el objetivo de conquistar Grecia. Si bien lucha junto a sus guerreros, es atacado por un número de criaturas dirigidas por el gigante Argos, que es enviado por Hera para detener la guerra que él está llevando a cabo. Sin embargo, antes de que Kratos pueda derrotar a la bestia, Argos es asesinado por un desconocido en un esfuerzo para destruir la reputación del antihéroe ante los dioses del Olimpo. Kratos lo persigue a través de Grecia con el fin de descubrir la identidad del líder del asesino que está tratando de poner a los dioses en su contra. Sin embargo, el hijo de Hermes, Cérix, es enviado a entregar un mensaje a Kratos de parte de Zeus, que está cada vez más preocupado con la cantidad de destrucción que Kratos deja tras de sí. Cérix ordena detenerse a Kratos, pero el dios de la guerra se niega e inicia una gran batalla contra el mensajero. Aprovechando la situación el asesino se escapa. Kratos mata a Cérix y los soldados espartanos lo celebran pero al observar el cuerpo del dios muerto se da cuenta de que Zeus tomará medidas de este acto de rebeldía.

Ya como dios de la guerra, Kratos sufre una visión en la que su madre le exigía ayuda desde Atlantis. A pesar de los avisos de Atenea de que lo que vio era simplemente un sueño, Kratos dirige una flota a la ciudad. Allí se encuentra con su madre, quien le revela que su hermano Deimos sigue con vida. Al intentar revelarle también la identidad de su padre, Calisto se convierte en un horripilante monstruo al que Kratos se ve obligado a matar. Junto con sus otras batallas en Atlantis, genera la destrucción total de dicha ciudad siendo expulsado a la isla de Creta. Vuelve posteriormente a Esparta para poder llegar al reino de la muerte, donde encuentra a Deimos en los dominios de Tánatos, siendo torturado. Su hermano lo culpa de no haberlo defendido el día de su desaparición y lo enfrenta. La batalla es ganada por Deimos, pero Tánatos interviene e intenta matarlo, a pesar de que Kratos llega a tiempo para evitarlo, el dios de la muerte termina asesinando a su hermano frente al dios de la guerra, quien enfurece totalmente y asesina a Tánatos. Al volver Atenea le revela que está listo para ser un dios. Sin embargo, Kratos jura venganza hacia los dioses.

Un general espartano invoca a Kratos para lograr la tan ansiada "gloria de Esparta" que este había anhelado por años. El dios de la guerra desciende del monte Olimpo a la ciudad de Rodas y comienza a destruir todo a su paso pero un águila se apoya sobre él y comienza a empequeñecerlo hasta devolverlo a su tamaño normal, luego el águila se coloca sobre el Coloso de Rodas y le da vida con la energía robada a Kratos. El espartano cree que ha sido Atenea. Zeus le entrega ayuda a Kratos ofreciéndole la espada del Olimpo con la que el rey de los dioses había acabado la gran guerra de dioses y titanes. Pero cuando Kratos trata de tomarla comienza a perder sus poderes divinos. Al fin quita la espada del suelo y termina con el coloso de Rodas. Pero cuando clamaba dirigiéndose a su padre, la mano del coloso lo impacta accidentalmente y lo daña de gravedad, destruyendo su armadura y dejándolo muy débil. Zeus muestra que era él esa águila que había robado los poderes de Kratos para dárselos al coloso. Zeus entendía que Kratos, intentaría acabar con él, como ocurría en la mitología griega, así que decide matarlo. Ya en el Inframundo, Gaia, la titánide, se presenta ante Kratos junto con los demás titanes y le ofrece ayuda a cambio de que destrone a Zeus del Olimpo. Kratos acepta, sale del Inframundo y comienza su viaje a la isla de la Creación en busca de las hermanas del destino para poder volver al pasado en el momento en que Zeus lo traicionó.

En la isla, Kratos asesina a Teseo, Ícaro, Perseo, Euríale, el Kraken y el jefe bárbaro con el que él había acabado cuando Ares acudió en su ayuda. Finalmente, se encuentra con las hermanas del destino y asesina a las tres, pudiendo volver al pasado al momento de la traición de Zeus. Vuelve, se enfrenta a él y lo vence, pero al momento de asesinarlo Atenea se cruza y sacrifica su vida para evitar la muerte de Zeus permitiéndole al dios del trueno escapar. Atenea justifica su acción con el pretexto de que Kratos al asesinar a Zeus acabaría con todo el Olimpo, pero él le dice que si el Olimpo se opone a su venganza entonces el Olimpo también sucumbirá. Atenea entonces le confiesa a Kratos que no puede asesinar a Zeus, dado que se repetiría de este modo el ciclo del hijo mata al padre, dándole a entender que Zeus es su padre. Tras esto, Atenea muere. Enfurecido, regresa a la cámara de las hermanas del destino para volver nuevamente al pasado, al momento de la gran guerra entre titanes y dioses y se lleva consigo a todos los titanes al presente para poder formular su tan ansiada venganza. Al final del juego, Kratos está sobre Gaia y junto a los demás titanes escalan el monte Olimpo en busca de asesinar a todos sus miembros, pero Zeus no le teme y prepara a los dioses para la batalla final.

En la guerra entre titanes y dioses olímpicos, Kratos comienza su venganza asesinando brutalmente a Poseidón. Luego cuando se encuentra con Zeus, este arroja al guerrero y a Gaia a un abismo, la titánide traiciona a Kratos para poder salvarse y deja que este caiga en el río de las almas del Inframundo, el cual lo debilita. A la salida de dicho río se encuentra con el fantasma de Atenea quien le ofrece sus consejos, las Espadas del Exilio y decide ayudarlo a matar a Zeus. En su camino se encuentra con una estatua que lo llama "padre". Él, esperanzado con que sea su hija Calíope, se apresura a responder, para entender que era otra niña, Pandora, lo que descubre luego. Luego hace un encuentro con Hades y lo asesina, consiguiendo las preciadas garras de Hades. Luego, Kratos se encuentra con Hefesto, quien le da ciertos consejos y le revela verdades sobre su pasado y el de su hija. Llega a la ciudad de Olimpia donde encuentra a Gaia apenas sostenida. No escucha los pedidos de ayuda de la titánide y le corta la mano con la espada del Olimpo, para arrojarla al vacío. Ya en la ciudad, acaba con Helios para obtener su cabeza. Luego el guerrero espartano se cruza con Hermes, a quien mata para poder robarle sus botas. Se enfrenta y asesina igualmente a su medio hermano Heracles, (también conocido como Hércules) consiguiendo así los Cestus de Nemea.

Llega a las fosas del Tártaro y se enfrenta en una cruenta lucha al titán Cronos, quien cree haber acabado con el espartano al habérselo tragado, pero este le abre un agujero en el estómago que lo debilita, para luego clavar la espada del Olimpo en su frente. Después, en los jardines superiores tiene una discusión con Hera, a quien termina matando por burlarse de Pandora. Kratos supera el laberinto de Dédalo y destruye a los tres jueces para poder acceder a la llama del Olimpo. Al llegar a ella, Pandora intenta sacrificarse pero Kratos la detiene, cuando ella le hace entrar en razón y se decide a dirigirse a la llama del Olimpo para así poder apagarla y que Kratos pueda abrir la caja , aparece Zeus, quien pelea con Kratos (cuya distracción provoca que Pandora logre su cometido) en tres ocasiones. Tras el sacrificio de Pandora, Kratos abre la caja y se da con la sorpresa que la caja se encontraba vacía. Al final de la segunda batalla, aparece la titánide Gaia, quien intenta acabar con ambos pero tanto Kratos como Zeus logran escapar al interior de Gaia, donde tiene lugar la tercera y última batalla. Kratos asesina a Gaia y cree asesinar al padre de los dioses, quien luego emerge de los escombros para matar al espartano. Kratos se refugia en su mente, donde se presentan los viejos y malignos recuerdos que lo atormentan, pero allí aparece Pandora y lo ayuda a perdonarse a sí mismo por todas las cosas malas que hizo en el pasado, liberando el poder de la esperanza que había permanecido oculto en él. Luego, Kratos vuelve a la realidad y finaliza su venganza, asesinando violentamente a Zeus. Luego, Kratos se queda contemplando cómo quedó el mundo, cuando de pronto aparece Atenea exigiéndole el poder de la esperanza, que había usado para matar a Zeus, pero Kratos se niega y desenfunda la espada del Olimpo, pero Kratos no mata a la diosa, sino que atraviesa la espada en su propio cuerpo, liberando la esperanza por todo el mundo. Al final, se puede apreciar que el cuerpo de Kratos no está, pero hay un rastro de sangre que apunta hacia el vacío y al mundo devastado por la muerte de los dioses.

Han pasado muchos años. Kratos vive ahora en las tierras nórdicas, muy lejos de la sombra de los Dioses. Aunque su vida ha permanecido muy tranquila, esta ha dado un cambio con la muerte de Faye, una mujer que conoció y con la que tuvo un hijo llamado Atreus. Faye quería que su cuerpo fuera quemado con troncos encantados, los cuales formaban un área que los protegian de ser descubiertos por enemigos. Kratos, al talar unos cuantos con su hacha Leviatán (la cual le fue entregada por Faye al igual que su escudo), rompió una zona del área que los protegía. Al quemar el cuerpo de su difunta esposa y obtener sus cenizas, Kratos va con Atreus a cazar un ciervo para que el niño pueda practicar con su arco; cuando por fin lo hirieron a tal punto de que no pueda caminar, un troll intenta llevárselo pero cuando Kratos y Atreus lo enfrentan este lo tira, y empieza la primera lucha del viaje, una vez el troll muerto, Kratos y Atreus regresan a casa. Al llegar platican un rato y después alguien empieza a tocar la puerta, Kratos le ordena a Atreus que se esconda mientras el lidia con el extraño, al verlo, el extraño claramente quería provocar a Kratos diciéndole que sabe de donde proviene, entonces el extraño lo empieza a golpear y Kratos le devuelve el golpe, empezando así su batalla; cuando Kratos logra aturdirlo lo aplasta con una roca, pero cuando se esta retirando el extraño le lanza la roca, dándole a conocer a Kratos que es invulnerable. Una vez más pelean, y Kratos logra aturdirlo otra vez y al hacer esto aprovecha para poder fracturarle el cuello, dejándolo muerto por un tiempo y arrojándolo después a una gran grieta en el suelo que causó su gran batalla.

Después de su pelea va de camino a casa, deciéndose que ya debe empezar el viaje con Atreus. En el transcurso del viaje irán matando y descubriendo nuevos enemigos (draugrs, cegadores, apariciones, caminantes de hel, etc),así como recursos para su viaje. A casi medio camino encuentran un jabalí de aspecto nunca antes visto, y se les ocurre cazarlo para la práctica de Atreus. Después de perseguirlo (ya herido), este se tira a suelo y al acercarse a él se encuentran con una bruja, la cual se siente indignada al ver al jabalí lastimado y les pide a Kratos y a su hijo que lo levanten y la sigan para curarlo, ya que afirma que es el último de su especie. Al entrar a su cabaña (la cual esta bajo una tortuga gigante e inofensiva) la bruja le pide a Atreus que vaya a buscar unas flores especiales que están en su jardín para poder curar al jabalí; y cuando este se va, la bruja tiene una pequeña conversación con Kratos y esta le revela que sabe quién es y de dónde proviene pero, promete no decir nada. Cuando Atreus regresa le revela a la bruja a donde se dirigen, y cuando están a punto de partir, la bruja les agradece poniéndoles un hechizo que impida que los dioses nórdicos puedan encontrarlos y, dándoles un atajo de camino a la montaña a través de su cueva subterránea (el cual es por mar). Ya saliendo de la cueva ven un lago y en este la estatua de Thor hundida hasta medio cuerpo, y otra que tenía runas (las cuales Atreus sabe leer gracias a su madre) las cuales le ordenaban que tiraran sus armas al mar.

El orden de los juegos no está estipulado por su orden de salida al mercado, sino que cada uno cubre una parte de la historia independientemente de cuando salió a la venta.

Posteriormente a la salida al mercado de PlayStation 3, ha habido varias compilaciones, para PS3, que integran los juegos que salieron originalmente para otras consolas.

Su lanzamiento fue el 19 de noviembre de 2009 en Norteamérica y el 28 de abril de 2010 en Europa. Es una compilación de los dos God of War que salieron para PlayStation 2, God of War I y II, además, incluye una demo de God of War III.

Su lanzamiento fue el 13 de septiembre de 2011 en Norteamérica y el 16 del mismo mes en Europa.

Incluye las dos ediciones de PSP, Chains of Olympus y Ghost of Sparta. Tiene la opción 3D y definición de hasta 1080p.

Fue lanzado el 28 de agosto de 2012 y desarrollado por SCE Santa Monica Studio, Bluepoint Games y Ready at Dawn Studios, además de tener incluido treinta días (un mes) de acceso a PlayStation Plus. Consta de dos Blu-Ray y un código para descargar la versión digital de los dos juegos de PSP.

Es una recopilación de los juegos salidos hasta 2012 (I, II, III, Chains of Olympus y Ghost of Sparta).

Su salida al mercado se produjo en noviembre de 2012. Incluye God of War: Collection, Origins Collection, III y God of War Ascension, además de una estatuilla de Kratos.[4]​ Este pack está disponible solamente en América.

Es un juego en tercera persona, con un sistema de ataque heredado de la saga Rygar: The Legendary Adventure[5][6]​ que se basa en dos espadas atadas por cadenas que las conectan al espartano. Además, en cada edición del juego se presentan distintos poderes mágicos entregados por diversos Dioses o Titanes, normalmente cinco o seis (excepto en God of War: Betrayal, en el que los tres poderes están sacados del primer God of War). En God of War III se formuló un nuevo sistema que acompañó al de los poderes mágicos, el de los objetos. No gastan magia, sino una barra especial amarilla que se recarga sola rápidamente si está en desuso.

Los combos son otro factor importante: al presionar una serie de botones en un orden determinado, Kratos realizará ataques más espectaculares y dañinos contra sus enemigos. La cantidad de combos se expandió mucho desde el primer God of War hasta el Ascension.

En la parte izquierda superior de la pantalla se encuentra una espada con la cantidad de vida, magia, orbes rojos y la barra amarilla de los objetos. Estos comienzan con un límite considerable y a medida que Kratos junta ojos de Gorgona, plumas de Fénix y cuernos de Minotauro podrá extender los límites de vida, magia y objetos respectivamente. Asesinando enemigos se consiguen los orbes rojos, necesarios para subir de nivel las armas y poderes para poder realizar más combos y aumentar el poder de ataque. Además, poseen muchos acertijos y rompecabezas. Esto fue modificándose en los juegos subsiguientes, agregándose cofres secretos en distintos lugares que otorgan grandes premios a quien los encuentre.

También cuenta con Quick time events, distintas cinemáticas interactivas donde el jugador debe presionar botones específicos en un determinado tiempo, si el jugador se equivoca en presionar o se tarda demasiado en responder, fallará y deberá repetir la secuencia, en cambio si la efectúa correctamente, producirá gran daño, la eliminación del jefe o enemigo atacado o el avance en segmentos específicos del trayecto.

La mayoría de los juegos fueron recibidos de manera muy positiva, Gamerankings dio calificaciones siempre superiores a 90[7][8][9][10]​(excepto en God of War: Ghost of Sparta[11]​). Metacritic recibió cada juego de manera muy similar,[12][13][14][15]​siendo el Ghost of Sparta el único God of War que no superó los 90.[16]​Los usuarios de esta página calificaron con un 86 a dicho juego.[16]​Demostrando que fue el juego que más decepcionó a los seguidores de la serie.

El juego para teléfonos móviles, God of War: Betrayal, fue igualmente bien recibido por la crítica en general, ya que ofrecía combates muy atrayentes mezclados con acertijos y puzles, lo que caracteriza a la saga.[cita requerida]

Kratos y la temática de la saga se presentan en diversos juegos de Sony Computer Entertainment, entre ellos están LittleBigPlanet,[17]Hot Shots Golf: Out of Bounds,[18]ModNation Racers,[19]​ y PlayStation All-Stars Battle Royale.[cita requerida]

Pero no solo videojuegos de Sony, en Mortal Kombat Kratos es un luchador exclusivo de PlayStation 3; posee ataques y combos que se asemejan mucho al Kratos de God of War III. Además de Soulcalibur: Broken Destiny.[20]

A través de filtraciones de artworks para un tentativo reinicio de la franquicia, se empezó a especular respecto a un nuevo videojuego que cambiaría totalmente el escenario y las deidades involucradas del juego. Posteriormente en el E3 de 2016 SCE Santa Monica Studio sorprendió gratamente a todos con su tráiler para el nuevo juego: God of War. Este juego hizo las veces de secuela y reinicio de la saga (algo similar a lo ocurrido con Resident Evil 4). Este nuevo juego continúa la historia protagonizada por Kratos, presentando como escenario un ambiente totalmente distinto al de la antigua Grecia. Este juego ubica a Kratos en las tierras nórdicas de escandinavia (lo que los vikingos llamarían Midgard), regida por los dioses de Asgard. No solo el personaje sino también su equipamiento cambia bastante. Sus espadas del caos han sido reemplazadas por un hacha, se lo ve con una larga barba que lo acerca a la estética de un vikingo, su carácter se ha serenado bastante y va acompañado de su hijo, Atreus. El juego se estrenó el 20 de abril de 2018, en exclusiva para la consola PlayStation 4.




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