Selva Almada (Villa Elisa, 5 de abril de 1973) es una escritora y feminista argentina. Es considerada una de las escritoras recientes más importante de Argentina y América Latina. Ha sido traducida al francés, inglés, italiano, portugués y alemán, entre otros.
Selva Almada nació en la ciudad de Villa Elisa, provincia de Entre Ríos, Argentina, y vivió allí hasta los 17 años. En 1991 se trasladó a la capital de Entre Ríos, Paraná, en donde estudió Comunicación Social. Sin embargo, abandonó esta última carrera para iniciar el Profesorado de Literatura en el Instituto de Enseñanza Superior de Paraná, al tiempo que dio forma a sus primeras producciones literarias; algunas de ellas elaboradas a partir del taller que Maria Elena Lothringer ofrecía en la Facultad de Comunicación.
Sus primeros relatos fueron publicados en el semanario Análisis, de Paraná. Asimismo, en esa ciudad dirigió entre 1997 y 1998 un breve proyecto literario cultural autogestionado denominado Caelum Blue. Tras ello, decidió mudarse a la ciudad de Buenos Aires en el 2000. Fue allí donde su formación como narradora se afianzó en buena medida tras participar del espacio creativo del taller literario de Alberto Laiseca.
Almada comenzó su carrera como escritora con la publicación de su libro de poemas Mal de muñecas (2003), y con su libro de cuentos Niños, de 2005. Tras estos la escritora publicó en 2007 su segunda colección de cuentos, Una chica de provincia.
Su producción literaria cobró particular prestigio y elogios de la crítica en 2012 con la publicación de su primera novela, El viento que arrasa. La misma tras su publicación contó con varias reediciones, fue publicada en el exterior, fue traducida al francés, portugués, holandés y alemán, y en 2016 se estrenó una ópera de Beatriz Catani y Luis Menacho basada en la novela. El mismo año de su publicación, la Revista Ñ destacó a El viento que arrasa como «la novela del año». Además, la novela obtuvo el Primer Libro del Festival Internacional del Libro de Edimburgo (más conocido como el First Book Award de Edimburgo) en 2019, tras su traducción al inglés.
Tras la publicación de su primera novela y en el mismo año, Almada publicó el libro electrónico Intemec, y después de este, en 2013, publicó su segunda novela, Ladrilleros.
Con la pubicación de su crónica de no-ficción de 2014, Chicas muertas, Almada visibilizó tres femicidios ocurridos en tres provincias argentinas en los años 80 y se proyectó como escritora feminista. Además, en la revista Anfibia escribió la crónica sobre femicidios Desde entonces, sigo viva. En 2015 publicó el libro de cuentos El desapego es una manera de querernos, en el cual reunió ciertos relatos ya publicados anteriormente o bien aparecidos en distintos medios.
Durante los meses de marzo a julio de 2017, Almada dictó un taller de lectura y escritura llamado Mirarse el ombligo. El relato autobiográfico. El mismo año, publicó su libro El mono en el remolino. Notas del rodaje de Zama de Lucrecia Martel, en el que la autora realizó una suerte de documental del rodaje de la película homónima de Lucrecia Martel.
De Almada, Beatriz Sarlo dijo:
En 2020 publicó junto a su hermana, Lilian Almada (quien hizo las ilustraciones), el libro de cuentos para niños Los inocentes, y más tarde ese mismo año publicó su tercera novela, No es un río, con la que la finalizó su denominada «trilogía de varones» (conformada por El viento que arrasa y Ladrilleros).
Actualmente, la escritora dicta diversos talleres literarios y reside en la ciudad de Buenos Aires.
Almada realizó con frecuencia viajes a la provincia de Chaco, lo que motivó —sumado eso a su experiencia rural de infancia y juventud transcurridas en el Litoral argentino— varios de los ambientes y temas de sus libros. Asimismo, la escritora se ha definido a sí misma como «una chica de provincia».
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