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Super Bowl III



El Super Bowl III fue el tercer juego de campeonato entre la AFL y la NFL en la historia del fútbol americano profesional, pero el primero en utilizar oficialmente el nombre de «Super Bowl» (los dos juegos de campeonato previos entre la AFL y la NFL serían conocidos, retroactivamente, como «Super Bowls»). Este partido es considerado como una de las mayores sorpresas en la historia del deporte estadounidense. Los campeones de la American Football League (AFL), los New York Jets (11-3), derrotaron a los campeones de la National Football League (NFL) y amplios favoritos, los Baltimore Colts (13-1), por un marcador de 16-7. Fue la primera victoria en un Super Bowl para un equipo de la AFL.

El juego se llevó a cabo el 12 de enero de 1969 en el Orange Bowl de Miami, Florida, donde se había disputado también el Super Bowl II. Antes del partido, los campeones de la NFL, los Colts, eran considerados grandes favoritos para vencer a los campeones de la AFL, los Jets. Aunque la recientemente formada AFL había logrado un acuerdo de fusión con la NFL tres años antes, generalmente no se consideraba que en la AFL hubiera el mismo grado de talento que en la NFL. Además, los representantes de la AFL habían sido derrotados fácilmente en los dos primeros Super Bowls.

Después de garantizar enérgicamente una victoria antes del partido, el quarterback de los Jets, Joe Namath, completó 17 de 28 pases para 206 yardas, y fue nombrado el Jugador Más Valioso del Super Bowl, a pesar de no lanzar un pase de touchdown en el partido o siquiera un pase en todo el cuarto cuarto.

La National Football League había dominado el fútbol americano profesional desde su origen después de la Primera Guerra Mundial. Varias ligas rivales se vinieron abajo o se fusionaron con ella, y cuando la American Football League comenzó a operar en 1960, fue la cuarta liga con ese mismo nombre en retar a la NFL. Al contrario de esas otras ligas, esta AFL fue capaz de tener los suficientes recursos financieros para sobrevivir; un factor clave para ello fue que se convirtió en la primera liga que firmó un contrato de televisión—previamente, las franquicias firmaban contratos de forma individual para que sus partidos fueran transmitidos por televisión—. La liga probó ser lo suficientemente exitosa como para poder hacer ofertas atractivas a los jugadores. De hecho, después de la temporada de 1964, hubo una guerra de ofertas o pujas muy publicitada, la cual finalizó con los New York Jets de la AFL firmando al quarterback de la Universidad de Alabama Joe Namath por un contrato sin precedentes para su época.[2]​ Temiendo que las guerras de pujas por jugadores se volvieran algo cotidiano, y que eso incrementara los costos de operaciones, los dueños de los equipos de la NFL, comandados por el comisionado Pete Rozelle, acordaron la fusión con la AFL. Ese acuerdo de fusión estableció un solo draft, partidos interligas en la pretemporada, un partido de campeonato al final de cada temporada y la integración de las dos ligas en una sola de una manera que sería decidida en una fecha futura.[3]​ Como las dos ligas tenían números distintos de equipos (la NFL tenía 16 equipos, la AFL tenía 10),[4]​ algunos propietarios propusieron un posible reordenamiento, pero fue recibido con oposición. Finalmente, tres equipos de la NFL estuvieron de acuerdo en unirse a las franquicias de la AFL en lo que se convirtió en la American Football Conference.[5]

A pesar de la fusión en curso, existía la opinión generalizada de que la NFL era una liga muy superior. Esto pareció ser confirmado por los resultados de los dos primeros juegos de campeonato entre ambas ligas, en enero de 1967 y 1968, en los que el campeón de la NFL, los Green Bay Packers, dirigidos por el legendario Vince Lombardi, derrotaron fácilmente a los Kansas City Chiefs y Oakland Raiders de la AFL.[6]

Los Baltimore Colts habían ganado los títulos de la NFL de 1958 y 1959 con el entrenador Weeb Ewbank. Durante los años siguientes, no obstante, los Colts no pudieron llegar a los playoffs y destituyeron a Ewbank después de una marca de 7-7 en la temporada de 1962. Fue contratado por la franquicia de la AFL en Nueva York, que acababa de cambiar su nombre de Titans a Jets. En lugar de Ewbank, Baltimore contrató a un joven entrenador sin experiencia, Don Shula.[7][8]​ Los Colts mejoraron con Shula, perdiendo contra los Cleveland Browns en el juego de campeonato de la NFL de 1964[9]​ y, en 1965, perdiendo en tiempo extra contra los Green Bay Packers en un juego de desempate para decidir el campeón de la división Oeste de la NFL.[10]​ Los Colts terminaron lejos de los Packers en el Oeste en 1966, y en 1967, cuando la NFL se dividió en cuatro divisiones de cuatro equipos cada una, comenzaron sin derrotas y con solo dos empates en sus primeros 13 partidos, pero perdieron el partido y el título de la división Coastal contra los Los Angeles Rams en el último domingo de la temporada —con las reglas de desempate establecidas en ese entonces, Los Angeles ganó el título divisional al tener más puntos netos en los partidos que jugaron dichos equipos (la victoria de los Rams y un empate previo)—. Los Colts terminaron 11-1-2, fuera de los playoffs.[11]​ En 1968, Shula y los Colts estaban entre los favoritos para ganar el título de la NFL, que incluía el boleto para disputar lo que comenzaba a conocerse popularmente como el Super Bowl contra el campeón de la AFL. El campeón de la NFL, en ambas ocasiones los Packers, había ganado fácilmente los dos primeros Super Bowls sobre los representantes de la AFL.

El camino de Baltimore hacia el campeonato parecía complicarse desde el inicio cuando el quarterback titular Johnny Unitas sufrió una lesión en su brazo de lanzar durante la pretemporada y fue reemplazado por Earl Morrall, un veterano que había iniciado partidos intermitentemente durante sus 12 temporadas con cuatro equipos distintos. Pero Morrall tendría el mejor año de su carrera, liderando la liga en eficiencia de pase (93,2) durante la temporada regular. Su actuación fue tan impresionante que el entrenador de los Colts Don Shula decidió mantener a Morrall en la alineación titular incluso después de que Unitas se hubiera recuperado lo suficiente para jugar. Los Colts habían ganado diez partidos en fila, incluyendo cuatro blanqueadas, y terminaron la temporada con la mejor marca de la NFL, 13-1. En esos diez partidos, habían permitido únicamente siete touchdowns. Después, los Colts vengaron su única derrota en temporada regular contra los Cleveland Browns al superarlos ampliamente, 34-0, en el juego de campeonato de la NFL.[12]​ Para el final de la temporada, muchas personas consideraban que los Colts eran uno de los mejores equipos de todos los tiempos, más fuertes incluso que los Green Bay Packers campeones de los Super Bowls I y II.

La ofensiva de los Colts fue la segunda en la NFL en puntos anotados (402). Los wide receivers Jimmy Orr (29 recepciones, 743 yardas, 6 touchdowns) y Willie Richardson (37 recepciones, 698 yardas, 8 touchdowns) eran dos buenos jugadores en trayectorias profundas para los Colts, con Orr promediando 25,6 yardas por atrapada y Richardson promediando 18,9. El tight end John Mackey también contabilizó 45 recepciones para 644 yardas y 5 touchdowns. El running back de Pro Bowl Tom Matte fue el mejor corredor del equipo con 662 yardas y 9 touchdowns. También atrapó 25 pases para 275 yardas y otro touchdown. Los running backs Terry Cole y Jerry Hill se combinaron para 778 yardas por tierra y 236 yardas por aire.

La defensa de los Colts comandó la NFL con la menor cantidad de puntos permitidos (144, empatando el récord de la liga de todos los tiempos en ese entonces), y posicionándose en tercer lugar en yardas terrestres permitidas (1339). Bubba Smith, un defensive end considerado el mejor jugador para presionar al quarterback contrario en la NFL, formaba parte de la línea defensiva. El linebacker Mike Curtis era considerado uno de los mejores en su posición en la liga. La secundaria de Baltimore consistía de los defensive backs Bobby Boyd (8 intercepciones), Rick Volk (6 intercepciones), Lenny Lyles (5 intercepciones) y Jerry Logan (3 intercepciones). Los Colts eran el único equipo en la NFL que jugaba mayoritariamente con una defensiva por zonas. Eso les otorgaba una ventaja en la NFL ya que los otros equipos de su liga eran inexpertos ante tal defensa. Esto, sin embargo, no representaría una ventaja sobre los Jets, debido a que las defensivas por zonas eran comunes en la AFL y los Jets sabían cómo atacarlas.[13]​ Después de ganaron el título de la NFL de 1968, los Colts fueron llamados por los medios deportivos el «mejor equipo en la historia del fútbol americano profesional».

Los New York Jets, comandados por el entrenador Weeb Ewbank (quien era el entrenador de los Colts cuando ganaron el famoso juego de campeonato de 1958), terminaron la temporada regular con una marca de 11-3 (siendo una de sus derrotas contra los Oakland Raiders en el célebre «Partido de ''Heidi''») y tuvieron que remontar para vencer a esos mismos Raiders, 27-23, en un emocionante juego de campeonato de la AFL.

El quarterback de los Jets Joe Namath lanzó para 3147 yardas durante la temporada regular, pero completó solamente 49,2% de sus pases, y lanzó más intercepciones (17) que touchdowns (15). Aun así, lideró a la ofensiva de forma suficientemente efectiva para finalizar la temporada regular con más puntos anotados totales (419) que Baltimore. Más importante aún, Namath generalmente encontraba formas de ganar. Por ejemplo, en los últimos minutos del cuarto del juego de campeonato de la AFL, Namath lanzó una intercepción que le permitió a los Raiders tomar la ventaja. Pero después compensó su error al completar tres pases consecutivos en la serie siguiente, avanzando el balón 68 yardas en tan solo 55 segundos para anotar un touchdown y retomar la ventaja para su equipo.

Los Jets contaban con varias armas a la ofensiva que Namath podía usar. El wide receiver y futuro miembro del Salón de la Fama Don Maynard tuvo la mejor temporada de su carrera, atrapando 57 pases para 1297 yardas (un promedio de 22,8 yardas por atrapada) y 10 touchdowns. El wide receiver George Sauer, Jr. contabilizó 66 recepciones para 1141 yardas y 3 touchdowns. El ataque terrestre de los Jets también fue efectivo. El fullback Matt Snell, un corredor de poder, fue el mejor corredor del equipo con 747 yardas y 6 touchdowns, mientras que el elusivo halfback Emerson Boozer contribuyó con 441 yardas y 5 touchdowns. Mientras tanto, el kicker Jim Turner convirtió 34 goles de campo y 43 puntos extra para un total combinado de 145 puntos.

La defensa de los Jets lideró la AFL en yardas terrestres totales permitidas (1195). Gerry Philbin, John Elliott y Verlon Biggs conformaban la línea defensiva. El núcleo de linebackers de los Jets era comandado por el middle linebacker Al Atkinson. La secundaria contaba con los defensive backs Johnny Sample (un antiguo Colt que había jugado en el juego de campeonato de la NFL de 1958), quien había conseguido 7 intercepciones, y Jim Hudson, que logró 5.

Varios de los jugadores de los Jets habían sido cortados por equipos de la NFL. Maynard había sido cortado por los New York Giants después de que perdieron el juego de campeonato de la NFL de 1958 contra los Colts. «Guardaba algo de amargura en mí», decía.[14]​ Sample había sido cortado por los Colts. «Estaba casi en un frenesí para cuando llegó la hora del partido», decía. «Le guardaba rencor a los Colts. Realmente estaba listo para ese partido. Todos nosotros lo estábamos».[14]​ El offensivo tackle Winston Hill había sido cortado cinco años antes por los Colts como novato en el campamento de entrenamiento. «Ordell Braase me hacía ver mal en el entrenamiento una y otra vez», decía.[14]​ Hill se encargaría de bloquear a Braase en el Super Bowl III.

En una fiesta de toda la noche para celebrar la victoria de los Jets sobre los Raiders en el club nocturno Bachelors III, Namath vertió champán sobre Johnny Carson mientras el personaje de la televisión comentaba: «Es la primera vez que te he visto desperdiciando las cosas».[15]

Después de ganar el campeonato de la AFL, Namath dijo que al menos cuatro quarterbacks de la AFL eran mejores que Earl Morrall, incluyendo a sí mismo, su suplente (Babe Parilli, de 38 años), John Hadl de los San Diego Chargers y Bob Griese de los Dolphins.[14][16]

A pesar de los logros de los Jets, generalmente no se consideraba que los equipos de la AFL tuvieran el mismo talento que los de la NFL. Sin embargo, tres días antes del partido, Namath apareció en el Miami Touchdown Club y audazmente predijo ante el público: «Vamos a ganar el partido. Lo garantizo». El entrenador de los Jets, Weeb Ewbank, en un segmento de NFL Films, bromeó que «podría haberle disparado» a Namath por dicha declaración. Namath más tarde dijo que solamente había hecho su famosa «garantía» en respuesta a un ruidoso aficionado de los Colts que se encontraba en el club, que se jactaba de que los Colts vencerían fácilmente a los Jets. Namath dijo que nunca buscó hacer una predicción tan pública, y que nunca lo habría hecho si no lo hubiera confrotado el aficionado.[17]​ Aun así, sus comentarios y su posterior actuación en el partido mismo son de las instancias más famosas de las tradiciones de la NFL.

Algunos analistas sugirieron que el récord de los Jets en la NFL podría haber sido 9-5, lo que habría hecho improbable que llegaran a los playoffs de la NFL de ese año, y aún más ser competitivos contra los dominantes Colts.

A pesar de esto, los campeones de la AFL compartían el sentimiento de confianza de su quarterback. De acuerdo con Matt Snell, todos los miembros de los Jets, no solo Namath, se sentían insultados y molestos de que fueran desfavorecidos por 18 puntos.[13]​ la mayoría de los Jets consideraba que los Raiders, a quien a penas vencieron (27-23) en el juego de campeonato de la AFL, era un mejor equipo que los Colts. No obstante, al ver videos de los Colts en preparación al partido, los entrenadores de los Jets y sus jugadores ofensivos notaron que su ofensiva se adaptaba particularmente bien a la defensa de los Colts. Los esquemas defensivos de los Colts dependían de mandar frecuentemente cargas sobre el quarterback, cubriendo así puntos débiles en la cobertura de pase. Los Jets tenían estrategias automáticas para tales cargas al dar pases cortos a tights ends o corredores desmarcados. Después de la sesión de filme el miércoles previo al partido, el tight end de los Jets Pete Lammons, nativo de Crockett, Texas, dijo: «Debería dejar de ver estas películas. Vamos a tener exceso de confianza».[16]

El partido fue transmitido en los Estados Unidos por NBC Sports —en ese entonces, todavía parte de NBC News— con Curt Gowdy como comentarista jugada a jugada, junto con Al DeRogatis y Kyle Rote como comentaristas de color. También participaron en la cobertura de NBC Jim Simpson (reportando desde el terreno de juego) y Pat Summerall (entrevistando a los jugadores antes del partido, junto con Rote). En una entrevista hecha más tarde con NFL Films, Gowdy lo llamó el partido más memorable que jamás había narrado debido a su importancia histórica.[18]

Aunque el Orange Bowl tenía las entradas agotadas, la transmisión en vivo no fue mostrada en Miami debido a las reglas incondicionales de bloqueo de la transmisión de ambas ligas en aquel entonces.

Por primera vez, algunas celebridades participaron en las cermonias del Super Bowl. El actor Bob Hope condujo una ceremonia previa al partido honrando a los astronautas del Programa Apolo y la misión recién completada Apolo 8, el primer viaje tripulado alrededor de la Luna.

La cantante Anita Bryant cantó el himno nacional, y la banda de la Florida A&M University tocó durante el espectáculo de medio tiempo titulado «America Thanks».[19]

La transmisión original de NBC fue retransmitida como parte de la serie de NFL Network Super Bowl Classics el día anterior al Super Bowl XLI, y de nuevo la noche anterior a los juegos de campeonato de la AFC y la NFC en 2010.

New York llegó al partido con su principal jugador para trayectorias profundas, el wide receiver Don Maynard, con un tendón de la corva lastimado. Pero su actuación de 112 yardas y dos touchdowns contra los Oakland Raiders en el juego de campeonato de la AFL hizo que la defensa de los Colts pusiera especial atención en él, no dándose cuenta de que estaba lastimado. Usando a Maynard como señuelo —no tuvo recepciones en el partido— Joe Namath fue capaz de tomar ventaja de la cobertura hombre a hombre sobre el wide receiver George Sauer, Jr. Después de estudiar la defensiva por zonas de los Colts, Ewbank le dijo a sus receptores: «Encuentren los puntos muertos entre las zonas, clávense y Joe les completará el pase».[13]​ Los Jets tenían un plan de juego conservador, poniendo énfasis en el acarreo y en pases cortos y de alta probabilidad de ser completados para minimizar las intercepciones. Mientras tanto, con la ayuda de varias jugadas afortunadas, la defensa de los Jets mantuvo a la ofensiva de los Colts sin anotar la mayor parte del juego.

El partido empezó mal para los Jets. Después de recibir la patada de salida ganaron únicamente 15 yardas en cinco jugadas y se vieron obligados a despejar. No obstante, el safety Rick Volk salió del partido a causa de una conmoción cerebral en la segunda jugada del partido al taclear a Snell, y se perdería gran parte del mismo. En la primera serie de los Colts, avanzaron el balón desde su propia yarda 27 a la yarda 19 de los Jets en once jugadas, con la ayuda de un pase de 19 yardas de Earl Morrall al tight end John Mackey en la primera jugada. Pero después de dos pases incompletos y un acarreo del quarterback sin ganancia de yardas se fueron con las manos vacías cuando el intento de gol de campo de 27 yardas del linebacker/kicker Lou Michaels se fue desviado hacia la derecha. «Casi podías sentir el hervor saliendo de él», dijo Snell.[13]

En la segunda posesión de los Jets, Namath lanzó un pase profundo a Maynard, quien, a pesar de su lesión, estaba desmarcado. El pase fue demasiado largo, pero la jugada ayudó a cambiar el curso del partido. Temerosos del veloz Maynard, los Colts decidieron rotar su defensiva por zonas para ayudar a cubrir a Maynard, dejando a Sauer con cobertura hombre a hombre de Lenny Lyles, ayudando a Sauer a atrapar 8 pases para 133 yardas, incluyendo una recepción crucial en el tercer cuarto de 39 yardas que mantuvo viva una serie anotadora. Los Jets continuaron corriendo con Snell hacia su lado izquierdo, con Boozer bloqueando a los linebackers, y obtuvieron primera oportunidad tras primera oportunidad. La defensa de los Colts estaba más preocupada de Maynard, el juego aéreo y de la amenaza de un touchdown largo de Namath a Maynard. Aunque los Colts no sabían de la lesión de Maynard, los Jets sí sabían que Lyles había sufrido de amigdalitis toda la semana, por lo que se alegraron cuando vieron su emparejamiento con Sauer.[20]

Con menos de dos minutos por jugar en el periodo, el punter de los Colts David Lee pateó un despeje de 51 yardas que encerró a los Jets en su propia yarda 4. Tres jugadas después, Sauer atrapó un pase de 3 yardas de Namath, pero lo soltó cuando fue tacleado por Lyles, y el linebacker de los Colts Ron Porter recuperó el fumble en la yarda 12 de New York. Sin embargo, en tercera oportunidad (la segunda jugada del segundo cuarto) el pase del quarterback de Baltimore Earl Morrall fue desviado por el linebacker de los Jets Al Atkinson, rebotando de forma extraña hacia arriba y siendo interceptado por el cornerback de los Jets Randy Beverly en la zona de anotación para un touchback. «Ese fue el partido a gran rasgos», dijo Matte.[14]​ Comenzando desde su propia yarda 20, Snell corrió en las siguientes cuatro jugadas, avanzando el balón 26 yardas. Los Jets tendrían éxito todo el día corriendo el balón hacia la izquierda con la ayuda de los bloqueos de Winston Hill, quien, según Snell, estaba ganándole en fuerza al defensive end de 36 años Ordell Braase, el que había atormentado al novato Hill en el campamento de entrenamiento de los Colts. Dijo Snell: «Braase prácticamente desapareció».[13]​ Namath posteriormente completó tres pases consecutivos, moviendo el balón hasta la yarda 23 de los Colts. El running back de los Jets Boozer ganó solamente 2 yardas en la siguiente jugada, pero Snell lo siguió con una recepción de 12 yardas hasta la yarda 9, un acarreo de 5 yardas hasta la yarda 4 y un touchdown de 4 yardas, nuevamente hacia el lado izquierdo. La anotación le otorgó a los Jets una ventaja de 7-0, y supuso la primera ocasión en la historia que un equipo de la AFL estaba al frente en un Super Bowl.

En la siguiente serie de Baltimore, un pase de 30 yardas de Morrall al running back Tom Matte ayudó a los Colts a avanzar hasta la yarda 42 de sus rivales, pero de nueva cuenta fallaron en su intento de anotar ya que el cornerback de los Jets Johnny Sample bloqueó el pase en tercera oportunidad de Morrall y Michaels falló su segundo gol de campo, esta vez de 46 yardas. Dos jugadas después de que los Jets tomaran la posesión a partir del gol de campo fallado, un pase de 36 yardas de Namath a Sauer le permitió a New York llegar a la yarda 32 de Baltimore. Pero Namath lanzó entonces dos pases incompletos y fue derribado en tercera oportunidad por el linebacker de los Colts Dennis Gaubatz para una pérdida de 2 yardas. El pateador de New York Jim Turner trató de salvar la serie con un gol de campo de 41 yardas, pero lo falló.

En la siguiente posesión, Baltimore fue de su propia yarda 20 hasta la yarda 15 de New York en tres jugadas, ayudados por el acarreo de 58 yardas de Matte, en ese entonces un récord de Super Bowl. Pero con dos minutos por jugar en la primera mitad, Morrall fue interceptado de nueva cuenta, en la yarda 2 de los Jets. Los neoyorquinos fueron forzados a despejar en esa posesión, y los Colts avanzaron hasta la yarda 41 de sus rivales. A continuación vino una de las jugadas más famosos en la historia del Super Bowl. Baltimore intentó una jugada de flea flicker, la cual tuvo un gran impacto en el momento anímico del partido. Matte corrió hacia el lado derecho tomando el balón, para después devolvérselo hacia atrás a Morrall. La jugada engañó por completo a los camarógrafos de NBC y a la defensa de los Jets, que dejó al receiver Jimmy Orr totalmente desmarcado cerca de la zona de anotación. No obstante, Morrall no lo vio y en su lugar le mandó el pase al running back Jerry Hill, que fue interceptado por el safety de los Jets Jim Hudson cuando se terminaba el tiempo, manteniendo la ventaja de 7-0 de los Jets al medio tiempo. Previamente en la temporada, contra los Atlanta Falcons, en la misma jugada, Morrall había completado el mismo pase para touchdown a Orr, el objetivo de la jugada. «Yo era el receptor primario», Orr dijo después. «Earl dijo que simplemente no me vio. Estaba desmarcado de aquí a Tampa». «Yo soy solamente un liniero, pero volteé y vi a Jimmy desmarcado», añadió el center Bill Curry. «No sé qué pasó».[21]

El tercer cuarto le perteneció a los Jets, quienes controlaron el balón durante todo el tiempo excepto tres minutos. Baltimore sacó solamente siete jugadas ofensivas en todo el cuarto, obteniendo únicamente 11 yardas. Matte perdió un fumble en la primera jugada desde la línea de golpeo en la segunda mitad, continuando con los sucesos desfavorables de la primera, lo que propició un gol de campo de 32 yardas de Turner que incrementó la ventaja de los Jets, 10-0. Después, habiendo forzado a los Colts a despejar nuevamente, Namath completó 4 pases para 40 yardas para dejar a Turner en posición de anotar un gol de campo de 30 yardas, aumentando la ventaja a 13-0. En esa serie, Namath salió del juego temporalmente después de lastimarse su pulgar derecho, y fue reemplazado por el quarterback suplente Babe Parilli por algunas jugadas. Namath regresó al final de tercer cuarto, pero los Jets no lanzarían un solo pase en todo el último cuarto.

Matt Snell dijo: «Para entonces, los Colts estaban presionando. Veías la frustración y preocupación en el rostro de todos ellos».[13]​ Después del segundo gol de campo de Turner, con cuatro minutos por jugar en el tercer cuarto, el entrenador de los Colts Don Shula sacó a Morrall del partido y puso en su lugar a Johnny Unitas, que tenía el brazo adolorido, para ver si podía producir una chispa que encendiera a la ofensiva de Baltimore. Unitas no pudo lograr que la ofensiva de los Colts avanzara en su siguiente serie y se vieron obligados a despejar de nuevo después de tres jugadas. Después, con la ayuda de un pase de 39 yardas de Namath a Sauer, los Jets llegaron a la yarda 2 de los Colts. La defensa de Baltimore no cedería, y los mantuvieron fuera de la zona de anotación. Turner convirtió su tercer gol de campo al comienzo del periodo final para poner el marcador 16-0.

En la siguiente posesión de Baltimore, lograron avanzar hasta la yarda 25 de los Jets. Sin embargo, Beverly terminó la serie interceptando un pase de Unitas en la zona de anotación, siendo la cuarta intercepción de los Jets en el partido. New York entonces llegó a la yarda 35 de los Colts con siete jugadas por tierra consecutivas, pero se fueron sin puntos después de que Turner fallara un intento de gol de campo de 42 yardas.

Unitas comenzó la siguiente serie con tres pases incompletos, pero completó un pase clave de 17 yardas a Orr en cuarta oportunidad. Diez jugadas después y con la ayuda de tres castigos de los Jets, finalmente Baltimore anotó un touchdown en un acarreo de 1 yarda de Hill para recortar la distancia a 16-7, pero con solamente 3:19 por jugar en el partido. Los Colts entonces recuperaron una onside kick y avanzaron hasta la yarda 19 de los Jets con tres pases completos consecutivos de Unitas, pero perdieron la posesión al no poder conseguir la primera oportunidad después de tres pases incompletos. Eso terminó con cualquier posibilidad de una remontada de Baltimore, al correr el balón los Jets en seis jugadas antes de ser forzados a despejar.

Para cuando los Colts recuperaron el balón, solamente quedaban 8 segundos en el partido. Los Colts intentaron dos pases antes de que se acabara el tiempo, y los Jets ganaron el Super Bowl III. Matt Snell dijo: «Saliendo del terreno de juego, vi que los Colts estaban exhaustos e incrédulos. No recuerdo a ningún miembro de los Colts que haya ido a felicitarme».[13]​ Mientras salía del campo, Namath, en un gesto espontáneo de desafío levantó su dedo índice, haciendo alusión al número uno.

Años después Morrall dijo: «Pensé que ganaríamos holgadamente. Solamente habíamos perdido dos de nuestros últimos treinta partidos. Todavía no estoy seguro de qué pasó ese día en el Orange Bowl; es difícil señalarlo».[14]​ Matt Snell dijo: «La imagen más distintiva que tengo de todo el juego es la de Ordell Braase y algunos otros —no tanto Mike Curtis— con miradas desconcertadas».[13]

Namath terminó el partido habiendo completado 17 de 28 pases. Es el único quarterback en haber ganado el MVP del Super Bowl sin haber lanzado un pase de touchdown. Snell corrió para 121 yardas en 30 acarreos y un touchdown, y atrapó 4 pases para 40 yardas. Sauer atrapó 8 pases para 133 yardas. Beverly se convirtió en el primer jugador en la historia del Super Bowl en conseguir 2 intercepciones. Morrall tuvo un día terrible: solamente 6 de 17 pases completos para 71 yardas, siendo interceptado tres ocasiones. A pesar de no haber entrado al partido sino hasta fines del tercer cuarto, Unitas terminó con más pases completos (11) y yardas aéreas (110) que Morrall, pero también lanzó una intercepción. Matte fue el mejor corredor de los Colts con 116 yardas en solo 11 acarreos, un promedio de 10,5 yardas por acarreo, y atrapó 2 pases para 30 yardas. Los Colts tuvieron una diferencia de -4 en entregas de balón, cometiendo cuatro de sus cinco entregas dentro del territorio de los Jets.

en Miami Orange Bowl, Miami, Florida

*Completos/Intentados aAcarreos bJugada más larga cRecepciones

Fuente: NFL.com[24]

Fuente: NFL.com[24]

Nota: El sistema de siete oficiales se instituyó hasta 1978.



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