La Base Aérea de Santa Lucía (también, Base Aérea Militar No.1 "General Alfredo Lezama Álvarez") (Código IATA: NLU - Código OACI: MMSM - Código DGAC: NLU) es operada por la Secretaría de la Defensa Nacional a través de la Fuerza Aérea Mexicana, está ubicada al sureste del municipio de Zumpango, en el Estado de México, y cuenta con una colonia residencial de efectivos militares del Ejército Mexicano. Dentro de sus instalaciones cuenta con la pista larga, lo que facilita las operaciones aéreas dentro de la base militar, con el objetivo de realizar acciones que impliquen a la seguridad nacional o en caso de desastres naturales.
El gobierno federal, mediante la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, tiene proyectado construir en este sitio un nuevo aeropuerto internacional que sirva a la Ciudad de México y la Zona Metropolitana del Valle de México. El proyecto tiene como fecha estipulada de inauguración el 21 de marzo del 2022, y se denomina oficialmente Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA).
La base aérea se encuentra inmediatamente al sur del pueblo de San Lucas Xolox, un asentamiento originalmente fundado por los mexicas en las orillas del lago de Xaltocan.
Las instalaciones de este campo de aviación se inauguraron parcialmente en 1952, debido a la necesidad de reubicar el Campo Aéreo Militar de Balbuena. El aeródromo se inauguró el 24 de noviembre de 1952, durante la presidencia de Miguel Alemán Valdés; sin embargo, las aeronaves que aún operaban en Balbuena se trasladaron a Santa Lucía en 1959. Tiene la pista más ancha de México (75 m) y es la segunda pista aérea más cercana al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México después de la del Aeropuerto de Atizapán.[cita requerida]
En la BAM No. 1, operan de forma permanente los siguientes escuadrones:
Pegasus PE-210A (XB-NKI) en la Feria Aeroespacial 2015, en la Base Aérea de Santa Lucía.
Embraer E-99, en plataforma.
C-26A Metroliner, en plataforma.
Lockheed T-33, en plataforma.
C-90 King Air, usado como avión de observación y reconocimiento, junto a los hangares.
Schweizer SA-2-37B, en plataforma.
Cessna Citation 500, con protectores de turbina.
AN-32B, en plataforma, el mismo que se accidentó el 24 de noviembre del 2010.
B-727-200, usado como avión de carga.
Super Puma, usado por la Coordinación General de Transportes Aéreos Presidenciales (CGTAP) como transporte presidencial.
Lancair IV-P, de la Fuerza Aeronaval de la Armada de México.
Beechcraft T-6 Texan II, en exhibición.
Valmet L-90, ya dado de baja por la Fuerza Aeronaval de la Armada de México, daba servicio en el PRIESINTREC.
Lancair Super ES, de la Aviación Naval Mexicana (AMP-163), en la Base Aérea de Santa Lucía.
Lockheed C-130 Hércules, matrícula 3606.
Mil Mi-26, ya dado de baja.
CASA C-212 Aviocar, de la Fuerza Aeronaval de la Armada de México.
Boeing PT-17, exhibido en el Museo del Aire.
Bell 412EP, sobrevolando Santa Lucía.
Alenia C-27J Spartan, en vuelo sobre Santa Lucía.
Pilatus PC-7, de la Escuadrilla acrobática del Colegio del Aire.
Lockheed T-33A Shooting Star (JE-042), en exhibición estática.
Cessna 550 Citation II (3929), de la Fuerza Aérea Mexicana.
Lockheed C-130E Hercules (3613), del EA-302.
Pilatus PC-7 (6531)
Sikorsky S-70A-28 Black Hawk (1093)
Beechcraft C-45A Expeditor (ETL-1320). exhibido en el Museo de la Fuerza Aérea Mexicana.
de Havilland DH-115 Vampire Trainer (Mk 11) (FAM-15), en exhibición.
Beechcraft C-45A Expeditor (ETL-1320), exhibido en el Museo de la Fuerza Aérea Mexicana.
Sikorsky S-70A-28 Black Hawk (1404), sobrevolando Santa Lucía.
Boeing 727-264 Adv. (3507) de la Fuerza Aérea Mexicana, en la Base Aérea de Santa Lucía.
de Havilland DH-115 Vampire Trainer (Mk 11) (FAM-15), en exhibición.
Douglas DC-6A Liftmaster (ETP-10018), en el museo de la Fuerza Aérea Mexicana.
Douglas C-47A-15-DK Skytrain (ETM-6048), en el museo de la Fuerza Aérea Mexicana.
North American T-6-G Texan (EAN-796), en el museo de la Fuerza Aérea Mexicana.
Beechcraft A23-19 Musketeer (EM-01) en el museo de la Fuerza Aérea Mexicana.
MD-530F (1138), de la Fuerza Aérea Mexicana, en el Museo del Aire, en Santa Lucía.
Northrop F-5E Tiger II (4510), en el Museo de la Fuerza Aérea Mexicana.
El (entonces) presidente Enrique Peña Nieto, inaugurando el Día de la Fuerza Aérea Mexicana, en la Base Aérea de Santa Lucía, en el 2013.
Los aeropuertos más cercanos son:
El gobierno federal se ha puesto como meta inaugurar el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) el 21 de marzo de 2022. La construcción costaría 68 mil millones de pesos mexicanos, incluida una conexión vial con el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México que operará en conjunto con el AIFA. Ambos aeropuertos y el Aeropuerto Internacional de Toluca formarán parte de una red aeroportuaria integral de la Zona Metropolitana de la Ciudad de México.
El AIFA contempla incorporar:
En marzo de 2018, como parte su campaña, Andrés Manuel López Obrador propuso la privatización del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM) o la ampliación de la base aérea de Santa Lucía para convertirla en un aeropuerto internacional, inclinándose finalmente por esta última.
En la primera quincena de octubre de 2018, López Obrador, ya como candidato ganador de las elecciones presidenciales, convocó a una "consulta popular", que organizaron la Fundación Arturo Rosenblueth y un grupo de ciudadanos. Por sí misma, la consulta causó cierta controversia, ya que en México desde 2014 se promulgó una ley que instituye la consulta popular como una forma de participación ciudadana, y el proceso que se llevó a cabo fue una encuesta realizada por un particular y sin validez oficial, donde los que participaron de este proceso podrían elegir si preferían continuar con la construcción del NAICM o interrumpirla. El resultado fue un "no"; antes del proceso López Obrador exhortó a los participantes a elegir el "no" indicando que la mejor opción eran sus planes alternativos para construir un nuevo aeropuerto internacional para la Zona Metropolitana del Valle de México en la base aérea de Santa Lucía.
El edificio de estacionamiento será de 6 niveles, para su primera fase se contempla un total de 3,900 cajones de estacionamiento y en su fase final albergaría un total de hasta 15 mil cajones que incluirán zonas de:
La terminal de carga no esta contemplada para entrar en operación para marzo del 2022, ya que aun no se tiene claro un diseño que cumpla con todas las necesidades de los operadores de carga, la SEDENA está invitando a los potenciales usuarios con el fin de poder tener una idea más clara de sus necesidades.
El proyecto ha planteado ampliar el Tren Suburbano, Metrobús, Mexibús y la modernización de la Carretera Federal México-Pachuca como vías de comunicación que permitirán la conectividad óptima del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles.
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